Domingo V de Cuaresma (C), 17-3-2013 Estamos cerca de la Semana Santa y celebramos el último domingo de Cuaresma. San Pablo dice: el objetivo de nuestra vida ¿cuál es?. Conocer a Jesús, vivir unidos …Más
Domingo V de Cuaresma (C), 17-3-2013
Estamos cerca de la Semana Santa y celebramos el último domingo de Cuaresma.
San Pablo dice: el objetivo de nuestra vida ¿cuál es?. Conocer a Jesús, vivir unidos a Jesús, compartir su Muerte y Resurrección, olvidar las ofensas del pasado, mirar hacia adelante y alcanzar la meta; Jesús y la vida eterna.
Y sabemos que Jesús nos mira con amor y ternura, con comprensión, nos da la paz y el perdón y nos invita a no volver a pecar y a renovar nuestra vida y nuestra fe.
Pedimos hoy también por el seminario y por todos los jóvenes que se preparan para el sacerdocio para que el Señor les haga fieles servidores suyos.
Lectura del santo Evangelio según San Juan (8, 1-11)
En aquel tiempo, Jesús se fue solo al monte de los Olivos. Al amanecer fue al templo otra vez y mucha gente iba a verle. Y Jesús les enseñaba. Algunos judíos fueron a ver a Jesús con una mujer pillada en adulterio, y le dijeron: -Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en adulterio. La ley de Moisés nos manda matar con piedras a las adúlteras: tú, ¿qué dices? Los judíos le preguntaban esto para acusarlo. Pero Jesús, sentado, escribía con el dedo en el suelo. Pero los judíos insistían. Jesús se levantó y les dijo: -Si alguno de vosotros no tiene pecados, que empiece el primero a tirarle piedras. Y Jesús se sentó otra vez y continuó escribiendo en el suelo. Y los judíos que oyeron a Jesús, se fueron marchando poco a poco, empezando por los más viejos. Y al final sólo estaban Jesús y la mujer. Jesús se levantó y dijo a la mujer: -Mujer, las personas que te han traído aquí, ¿dónde están?, ¿ninguna persona te ha condenado? La mujer contestó: -Nadie, Señor. Jesús la dijo: -Yo tampoco te condeno. Vete, y a partir de ahora no peques más.
Estamos cerca de la Semana Santa y celebramos el último domingo de Cuaresma.
San Pablo dice: el objetivo de nuestra vida ¿cuál es?. Conocer a Jesús, vivir unidos a Jesús, compartir su Muerte y Resurrección, olvidar las ofensas del pasado, mirar hacia adelante y alcanzar la meta; Jesús y la vida eterna.
Y sabemos que Jesús nos mira con amor y ternura, con comprensión, nos da la paz y el perdón y nos invita a no volver a pecar y a renovar nuestra vida y nuestra fe.
Pedimos hoy también por el seminario y por todos los jóvenes que se preparan para el sacerdocio para que el Señor les haga fieles servidores suyos.
Lectura del santo Evangelio según San Juan (8, 1-11)
En aquel tiempo, Jesús se fue solo al monte de los Olivos. Al amanecer fue al templo otra vez y mucha gente iba a verle. Y Jesús les enseñaba. Algunos judíos fueron a ver a Jesús con una mujer pillada en adulterio, y le dijeron: -Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en adulterio. La ley de Moisés nos manda matar con piedras a las adúlteras: tú, ¿qué dices? Los judíos le preguntaban esto para acusarlo. Pero Jesús, sentado, escribía con el dedo en el suelo. Pero los judíos insistían. Jesús se levantó y les dijo: -Si alguno de vosotros no tiene pecados, que empiece el primero a tirarle piedras. Y Jesús se sentó otra vez y continuó escribiendo en el suelo. Y los judíos que oyeron a Jesús, se fueron marchando poco a poco, empezando por los más viejos. Y al final sólo estaban Jesús y la mujer. Jesús se levantó y dijo a la mujer: -Mujer, las personas que te han traído aquí, ¿dónde están?, ¿ninguna persona te ha condenado? La mujer contestó: -Nadie, Señor. Jesús la dijo: -Yo tampoco te condeno. Vete, y a partir de ahora no peques más.