¿TUVIERON QUE VER LOS JUDÍOS EN LA MUERTE DE JESÚS? (8)
A la vista de los comentarios confusos y desacertados de D. Antonio Piñero en el diario ABC, un amigo estudioso de la Biblia, me pasa su opinión pormenorizada sobre cada una de las preguntas y respuestas de este Catedrático, que voy a ir publicando.
Transcribo la introducción que hace ABC:
Antonio Piñero: «Los judíos tuvieron poco que ver con la muerte de Jesús»
César Cervera / Madrid
Día 04/04/2015 - 13.19h
Uno de los mayores expertos internacionales en el Israel del siglo I responde para ABC varias de las cuestiones históricas en torno a la muerte de Jesucristo y los problemas teológicos que surgieron entre sus seguidores. El pensamiento de uno de los más destacados, Pablo de Tarso, es el objeto de estudio del próximo libro del profesor Piñero.
8ª OPINIÓN
PREGUNTA:
-¿Jesús no está considerado uno de los fundadores del Cristianismo desde un punto de vista histórico?
SR. PIÑERO:
-Si un individuo proclama de una forma directa o indirecta por su vida y por el conjunto de información que de él se conserva que nunca quiere fundar una religión, como en el caso de Jesús, que buscaba entender profundamente y reformar el Judaísmo, o el de Pablo de Tarso, que quería vivir el Judaísmo según el Mesías, no se le puede considerar un fundador del Cristianismo, a no ser que digas que es un fundador inconsciente. El Cristianismo tarda en consolidarse como mínimo 400 años después de la muerte de Jesús y tiene muchos fundadores. De Pablo de Tarso se puede decir que fue el primero que reinterpreta a Jesús y pone los máximos fundamentos, pero los fundadores empiezan a su muerte a través de sus discípulos. Uno de ellos probablemente fue el evangelista Marcos, que es muy paulino.
OPINIÓN:
La Biblia es la colección de libros que, escritos bajo la inspiración del Espíritu Santo, tienen a Dios por autor. La Biblia católica la componen 73 libros. Se divide a su vez en dos grandes grupos: El Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento.
El Antiguo Testamento precisó de prescripciones rudimentarias que instruyesen al pueblo sobre el respeto a la vida, el respeto mutuo y su dependencia al Ser Supremo.
El Nuevo Testamento contiene las enseñanzas de Jesucristo, que vino a perfeccionar el A.T., a darle plenitud y a espiritualizar a la humanidad, para que pueda participar la Naturaleza humana de la Naturaleza Divina.
Estas enseñanzas están recogidas en los Evangelios (Mateo, Marcos, Lucas y Juan), junto con el resto de Libros, también inspirados, que divulgan esas enseñanzas.
Luego, los Evangelios, o mejor dicho el Evangelio, que es sólo un conjunto, puede definirse como la BUENA NUEVA de la salud divina que aparece con Jesucristo y que inaugura la nueva y definitiva edad del mundo.
Así que, si Jesucristo nos está enseñando la doctrina definitiva, que consta en el Nuevo Testamento y que se le ha venido a llamar Cristianismo, ¿puede o no puede considerarse su fundador? (Act.11,26) “...en Antioquía comenzaron los discípulos a llamarse “cristianos””.
Todos los discípulos tuvieron que ver en la expansión del Cristianismo, aunque el que nos ha dejado una constancia más extensa haya sido Pablo.
Pablo confiesa en la carta a los Gálatas de donde le viene sus conocimientos: (Gal.1,11/12) “Porque os hago saber, hermanos, que el Evangelio por mí predicado no es de los hombres, pues yo no lo recibí o aprendí de los hombres, sino por revelación de Jesucristo.”
(SEGUIRÁ...)