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Papa en Santa Marta: «El cristiano es misericordioso, la rigidez es signo de corazón débil» 15 de diciembre de 2014.- (Radio Vaticano / Camino Católico) Quien tiene un corazón débil, porque no se …Más
Papa en Santa Marta: «El cristiano es misericordioso, la rigidez es signo de corazón débil»

15 de diciembre de 2014.- (Radio Vaticano / Camino Católico) Quien tiene un corazón débil, porque no se basa en Cristo, es rígido en la disciplina exterior, pero hipócrita y oportunista dentro. Lo recordó el Papa en la homilía de la misa en la Casa Santa Marta, comentando el evangelio de Mateo, en el que los jefes de los sacerdotes preguntan a Jesús con qué autoridad realiza sus obras. ‘A ellos “no les interesaba la verdad”, sino que sólo buscaban sus intereses, moviéndose “según el viento”: ‘Conviene ir por acá, conviene ir por allá…’ eran banderolas.
Jesús, por el contrario, nos enseña que el cristiano debe tener un corazón fuerte, un corazón firme, no se negocia el corazón, no se negocia la roca. La roca es Cristo, no es negociable.

“Pío XII nos liberó de aquella cruz tan pesada que era el ayuno eucarístico. Tal vez alguno de ustedes lo recuerdan. Ni siquiera se podía tomar una gota de agua. ¡Ni siquiera! Y para lavarse los dientes, se tenía que hacer sin tragar agua. Yo mismo de muchacho fue a confesarme de haber hecho la comunión, porque creía que una gota de agua había ido dentro. Es verdad ¿o no? Es verdad. Cuando Pío XII cambió la disciplina – ‘¡Ah, herejía! ¡No! ¡Ha tocado la disciplina de la Iglesia!’ – tantos fariseos se escandalizaron. Tantos. Porque Pío XII había hecho como Jesús: ha visto la necesidad de la gente. ‘Pero pobre gente, ¡con tanto calor!’. Estos sacerdotes que celebraban tres Misas, la última a la una, después de mediodía, en ayunas. La disciplina de la Iglesia. Y estos fariseos eran así – ‘nuestra disciplina’ – rígidos en la piel, pero como Jesús les dijo, ‘putrefactos en el corazón’, débiles, débiles hasta la putrefacción. Tenebrosos en el corazón”.


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