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3 julio: Sto Tomás, Apóstol - Tocar las llagas. TOCAR LAS LLAGAS El apóstol Tomás «necesitaba» tocar las llagas de Cristo resucitado para creer de verdad en él. No andaba del todo descaminado el «…Más
3 julio: Sto Tomás, Apóstol - Tocar las llagas.

TOCAR LAS LLAGAS
El apóstol Tomás «necesitaba» tocar las llagas de Cristo resucitado para creer de verdad en él. No andaba del todo descaminado el «incrédulo» Tomás. Sólo que el objeto de su contacto era demasiado restringido y poco comprometedor.
El texto de F. Ulibarri acompaña a ampliar la perspectiva de Tomás, o quizás a orientarla más atinadamente.
Sí, Jesús, el Viviente, quiere que «toquemos sus llagas», las que supuran en los cuerpos y las almas de tantos y tantos miembros de su Cuerpo místico, con los cuales Él se identifica.
Sólo echando «vino y aceite» (Lc 10,34) sobre las llagas ajenas, curarán nuestra fe vacilante las llagas del Resucitado

COMISION DE V. C.
jahfuentes
👍 👏 👍 👏 👍 👏
Señor gracias por el don de la fe,
pero te ruego que me hagas firme en ella, me la aumentes y vigiles mi confianza solo en Ti. Amén.
monica medina
Bendito es Dios en sus Santos. El Espíritu del Amor viviente nos permita como a Santo Tomás creer, orar y obrar.
Germen
EXCELENTE REFLEXIÓN. DIOS NOS TOQUE EL CORAZÓN. 👏 👏 👏 👍
QUE DIOS NOS CONCEDA AMAR AUTÉNTICAMENTE ASÍ, A CADA UNO DE NUESTROS HERMANOS, MIEMBROS SUFRIENTES DEL CUERPO MÍSTICO DE CRISTO. Debemos crecer en el amor y, para ello, hay que amar constantemente, y dar y seguir dando hasta que nos duela... Hacer cosas ordinarias con un amor extraordinario. Este dar hasta que duela, ese sacrificio, es …Más
EXCELENTE REFLEXIÓN. DIOS NOS TOQUE EL CORAZÓN. 👏 👏 👏 👍
QUE DIOS NOS CONCEDA AMAR AUTÉNTICAMENTE ASÍ, A CADA UNO DE NUESTROS HERMANOS, MIEMBROS SUFRIENTES DEL CUERPO MÍSTICO DE CRISTO. Debemos crecer en el amor y, para ello, hay que amar constantemente, y dar y seguir dando hasta que nos duela... Hacer cosas ordinarias con un amor extraordinario. Este dar hasta que duela, ese sacrificio, es lo que llamo amor en acción (Teresa de Calcuta). Las palabras de la Madre Teresa son sencillas, sin alta filosofía, sin expresiones brillantes, pero conmueven de una manera singular pues brotan de alguien que realmente las ha hecho vida. Cada frase despierta el corazón en una invitación a amar hasta el extremo, hasta que duela.