La Fiesta De San Elías En Haifa. El 20 de julio es el día que, desde siempre, recuerda a Elías, uno de los profetas más importantes del Antiguo Testamento. Según la tradición, en Haifa, en la iglesia …Más
La Fiesta De San Elías En Haifa.
El 20 de julio es el día que, desde siempre, recuerda a Elías, uno de los profetas más importantes del Antiguo Testamento. Según la tradición, en Haifa, en la iglesia que conserva la gruta donde vivió, varios ritos cristianos se alternan durante la mañana para la celebración de la misa. A las 10.00 oficiaron los melquitas, guiados por el arzobispo Elías Chacour. Una fiesta, la de Elías, que incluso reunió frente a la iglesia de Stella Maris a diversos fieles de otras religiones.
Venimos de la Cáritas de Ramallah, la que tiene su sede en Jerusalén. Siempre venimos aquí para orar y es bello porque cada año lo hacemos junto a los fieles de otras religiones monoteístas.
Frente a la Virgen del Carmelo, encima de la gruta del profeta, una iglesia llena escuchó atenta las palabras del patriarca durante la misa: "Elías significa mi Dios es el Señor". De este modo es, todavía hoy, una advertencia para que sea así también para nosotros siempre. Y luego, el rito intercalado continuamente con cantos y entonaciones melodiosas, hasta que se distribuye el pan bendecido. Al final, todos los fieles pasan frente a la gruta para rendir homenaje al santo, y al terminar la misa aún existen las ganas de estar afuera y festejar más, aunque la fiesta -- dicen -- ha cambiado en el tiempo:
En la fiesta de San Elías veníamos desde todo Israel para estar aquí una semana, poníamos las tiendas y estábamos aquí. Pero ahora la montaña no la podemos utilizar. Una vez, se hizo mucha fiesta después de la misa, hubieron bautismos y algunos jóvenes se pusieron a bailar y a beber arack. Ahora los cristianos no podemos utilizarla.
A pesar de todo, todavía es grande la devoción entre los cristianos de Tierra Santa a este gran personaje del Antiguo Testamento, que venció a los profetas del dios Baal, precisamente aquí, sobre el Carmelo.
He venido aquí para celebrar la fiesta, mi hijo se llama Elías y desde que nació venimos cada año para orar y recibir su bendición
El 20 de julio es el día que, desde siempre, recuerda a Elías, uno de los profetas más importantes del Antiguo Testamento. Según la tradición, en Haifa, en la iglesia que conserva la gruta donde vivió, varios ritos cristianos se alternan durante la mañana para la celebración de la misa. A las 10.00 oficiaron los melquitas, guiados por el arzobispo Elías Chacour. Una fiesta, la de Elías, que incluso reunió frente a la iglesia de Stella Maris a diversos fieles de otras religiones.
Venimos de la Cáritas de Ramallah, la que tiene su sede en Jerusalén. Siempre venimos aquí para orar y es bello porque cada año lo hacemos junto a los fieles de otras religiones monoteístas.
Frente a la Virgen del Carmelo, encima de la gruta del profeta, una iglesia llena escuchó atenta las palabras del patriarca durante la misa: "Elías significa mi Dios es el Señor". De este modo es, todavía hoy, una advertencia para que sea así también para nosotros siempre. Y luego, el rito intercalado continuamente con cantos y entonaciones melodiosas, hasta que se distribuye el pan bendecido. Al final, todos los fieles pasan frente a la gruta para rendir homenaje al santo, y al terminar la misa aún existen las ganas de estar afuera y festejar más, aunque la fiesta -- dicen -- ha cambiado en el tiempo:
En la fiesta de San Elías veníamos desde todo Israel para estar aquí una semana, poníamos las tiendas y estábamos aquí. Pero ahora la montaña no la podemos utilizar. Una vez, se hizo mucha fiesta después de la misa, hubieron bautismos y algunos jóvenes se pusieron a bailar y a beber arack. Ahora los cristianos no podemos utilizarla.
A pesar de todo, todavía es grande la devoción entre los cristianos de Tierra Santa a este gran personaje del Antiguo Testamento, que venció a los profetas del dios Baal, precisamente aquí, sobre el Carmelo.
He venido aquí para celebrar la fiesta, mi hijo se llama Elías y desde que nació venimos cada año para orar y recibir su bendición