El 13 de diciembre, el Papa Francisco aprobó el decreto del milagro atribuido a la intercesión de la Beata Marie Rivier, religiosa conocida por ser la fundadora de la Congregación de las Hermanas de la Presentación de María.
A la Beata Marie Rivier se le atribuye haber intercedido en la curación milagrosa de una niña recién nacida con hidropesía embriofetal no inmunológica generalizada temprana, que ocurrió en 2015, en Filipinas. Tras la aprobación del Santo Padre, solo resta esperar el anuncio de la fecha de su canonización.
La Beata Anne Marie Rivier nació el 19 de diciembre de 1768 en Montpezat-sous-Bauzon (Francia). Cuando ella tenía solo 16 meses de nacida sufrió un accidente: se cayó de su cama y se rompió la cadera.