El obispo de Fréjus-Toulon, monseñor Dominique Rey, cuya propia deposición es inminente, ha suspendido al padre Antoine Coelho, un fundador que ha encontrado el enlace perfecto entre la espiritualidad y la carnalidad.
Coelho, fundador de la Casa del Espíritu Santo, una comunidad carismática disuelta el 16 de marzo, anunció el 19 de marzo que se casaba con una barcelonesa de 26 años, miembro de su antigua comunidad.
Ambos describieron su relación como una “encarnación mística del Espíritu Santo”. La diócesis está acompañando a la antigua comunidad, incluso brindando apoyo psicológico. Monseñor Rey ha recibido personalmente a los miembros.
Según el sitio web AciPrensa.com, Coelho le dijo a un amigo que estaba cumpliendo “la voluntad de Dios” y que ahora vive en “paz”. Se espera que el matrimonio lo ponga sobrio.
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