
El lunes él recibió la Unción de los Enfermos y, después de ello, mostró alguna mejora.
Rivera está siendo tratado en un hospital privado que no está cubierto por su seguro de salud. En consecuencia, pidió a la arquidiócesis de México apoyo financiero. La arquidiócesis se negó.
El padre Hugo Valdemar, vocero de Rivera, sugirió que la arquidiócesis había abandonado al cardenal.
Sin embargo, la arquidiócesis contestó que los clérigos que sufren de Covid-19 deberán encontrar asistencia en el sistema de hospitales públicos, “en solidaridad con los miles de mexicanos que recurren a ese sistema durante esta pandemia”.
Imagen: Norberto Rivera Carrera © wikicommons, CC BY-SA, #newsZyuubnptqv
