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LUTERO EN EL INFIERNO. Y no puede estar Lutero y los que hacen comunión espiritual con el no. Les aseguro que todo el que hace comunión espiritual con el espíritu de Lutero, toma parte con el, en el …Más
LUTERO EN EL INFIERNO.

Y no puede estar Lutero y los que hacen comunión espiritual con el no.
Les aseguro que todo el que hace comunión espiritual con el espíritu de Lutero, toma parte con el, en el error que lo llevó a la condenación.
Al igual en todo y en forma general. Todo el que de una manera u otra, comulga con el error, le pasará lo mismo.
Pablo Muggeri compartió esto
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Lutero.
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Lutero.

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Rafael A.
Por 500 años, la santa Iglesia Católica, determinó y vio a Lutero como el condenado que dividió la Iglesia, en su pecado de soberbia. Hoy un papa sin fe Católica, que cree en todo menos en el Díos Católico, introduce estás herejias de manera autoritaria y dictatorial, en su afán por destruir la fe Católica que impide el avance de los enemigos del catolicismo. Levantando un luteranismo enfermo …Más
Por 500 años, la santa Iglesia Católica, determinó y vio a Lutero como el condenado que dividió la Iglesia, en su pecado de soberbia. Hoy un papa sin fe Católica, que cree en todo menos en el Díos Católico, introduce estás herejias de manera autoritaria y dictatorial, en su afán por destruir la fe Católica que impide el avance de los enemigos del catolicismo. Levantando un luteranismo enfermo, que podemos reconocer en sus frutos.
Hermanos esto que piensa esta persona es lo mismo que piensa Bergoglio.

Nosotros como Católicos y siguiendo las directrices del santo Magisterio y del proceso canónico que utilizó el tribunal eclesiástico para la beatificación de María Serafina Micheli, y que con esta acción certifica su testimonio cómo válido y verdadero, nos acogemos al Magisterium ecleciam.
Hermanos esto es lo que por congraciarse con estos corazones Luteranos, ha querido Bergoglio introducir en el Vaticano, estas mismas estupideces doctrinales.
Mary Shela
infocatolica.com/…/1611210325-la-m…Sav
vv..Por supuesto que lo que comente sobre la muerte de Lutero es verdad y lo sostengo, hay demasiada evidencia al respecto, tómese el tiempo de leer esta publicación de Infocatolica escrita por el P. Olivera Ravasi..
saavv
MARY SHELA:
Perdone, pero no tiene ni idea histórica de Lutero. 1º Lutero no murió ahorcado; sino en su cama de muerte natural, tranquila y encomendando su alma a Dios. 2º. No murió el 15 de febrero; sino el 18. 3ª. El 15 de febrero no es la Cátedra de San Pedro; sino que es el día 22. POR CARIDAD: ¡No opine si no sabe!Más
MARY SHELA:

Perdone, pero no tiene ni idea histórica de Lutero. 1º Lutero no murió ahorcado; sino en su cama de muerte natural, tranquila y encomendando su alma a Dios. 2º. No murió el 15 de febrero; sino el 18. 3ª. El 15 de febrero no es la Cátedra de San Pedro; sino que es el día 22. POR CARIDAD: ¡No opine si no sabe!
Mary Shela
Lutero murió ahorcado... quien había despotricado contra la Iglesia, el Papado y la doctrina católica, el 15 de febrero de 1546, fiesta de la Cátedra de San Pedro, abandonaba voluntariamente su vida mortal a las tres de la mañana, la anti–hora de la redención que nos trajo Nuestro Señor Jesucristo en el calvario.
RemanentedeCristo
Por eso advirtió en mismo Señor Jesucristo que no todo el que me dice Señor Señor entrará en el Reino de los Cielos sino los que cumplen la voluntad de Dios.
RemanentedeCristo
El reprobó Martín Lutero murió excomulgado y en pecado de herejía, apostasía y cisma.
saavv
ESTAS FUERON LAS ÚLTIMAS PALABRAS DE MARTÍN LUTERO: “¡Oh Padre mío celestial, Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Dios de toda consolación! Yo te agradezco el haberme revelado a tu amado Hijo Jesucristo, en quien creo, a quien he predicado y confesado, a quien he amado y alabado… Te ruego, Señor mío Jesucristo, que mi alma te sea encomendada. ¡Oh Padre celestial! Tengo que dejar ya este …Más
ESTAS FUERON LAS ÚLTIMAS PALABRAS DE MARTÍN LUTERO: “¡Oh Padre mío celestial, Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Dios de toda consolación! Yo te agradezco el haberme revelado a tu amado Hijo Jesucristo, en quien creo, a quien he predicado y confesado, a quien he amado y alabado… Te ruego, Señor mío Jesucristo, que mi alma te sea encomendada. ¡Oh Padre celestial! Tengo que dejar ya este cuerpo y partir de esta vida, pero sé cierto que contigo permaneceré eternamente y nadie me arrebatará de tus manos”.

Citado por R. García-Villoslada, Martín Lutero, Vol. II, Madrid 1973, p. 574-575.