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San Bernardo de Claraval: "Sé concha y no canal" Estaba lleno a rebosar de Dios, de su Amor, revelado por Jesucristo, en el cual meditaba diariamente, en las Santas Escrituras. Decía a sus monjes: "…Más
San Bernardo de Claraval: "Sé concha y no canal"
Estaba lleno a rebosar de Dios, de su Amor, revelado por Jesucristo, en el cual meditaba diariamente, en las Santas Escrituras. Decía a sus monjes: "Sé concha y no canal". ¿Concha y no canal? Sí, porque, explicaba él, a veces decimos que tenemos que ser canal del amor de Dios. Allí está el amor de Dios y allí están las personas. Yo tengo que ser canal para que este amor de Dios llegue a las personas. Eso, decía él, no sirve, porque todos buscamos una plenitud, y el canal no está nunca lleno. Cuando el amor de Dios ha pasado, yo quedo seco y los otros, al cabo de poco tiempo, también quedan secos y sedientos. En cambio, decía, si soy una concha bajo la fuente del amor eterno de Dios, entonces, siempre estoy lleno a rebosar de este amor; lleno a rebosar de este amor, no dejaré de amar a Dios y a los hermanos.
Josefina Rojo
Me encanta este tipo de anécdotas de santos. Recuerdo que cuando era niña, mamá y una tía leían todas las tardes algún libro en voz alta y recuerdo haberlas escuchado leyendo la vida de San Bernardo de Claraval. Muchas gracias por traerlo a la vida moderna como ejemplo del verdadero desprendimiento y el gozo de la vida interior.