Testimonio 1o del P.Wilson Salazar.

Un sacerdote católico fue acusado de pederastía en la Inspección de Florida, municipio de Anolaima en Cundinamarca (Colombia). La Iglesia del lugar quedó prácticamente sin fieles, a excepción de unas pocas personas que asistían a misa y algunos jóvenes que apoyaban la organización de la capilla.
El padre Wilson Salazar es el nuevo párroco de la Inspección de Florida (a esta fecha, casi un año después del suceso) con el sacerdote detenido. Le conocimos en su actitud de adoración absoluta al Santísimo, entrega a la comunidad, entusiasmo sin límites por la Iglesia y sobre todo compromiso con el Evangelio.
Inició sólo, en medio de una comunidad golpeada, que en mas de una ocasión le miró a su llegada incrédulamente y con expresiones de hostilidad que se reflejaba en una asistencia de pocas personas al templo.
Pero hoy la realidad es totalmente diferente. En este caserío de sólo 1500 habitantes, prácticamente toda la comunidad participa con entusiasmo y amor de los actos religiosos.
Llenan la Iglesia en cada una de sus Eucaristías dominicales, e incluso en semana.
Se unen en un sólo grito para decir "¡Viva Cristo Rey", para luego anunciar con alegría que Cristo Vive en el corazón de cada uno y recordar las palabras del Arcangel San Miguel cuando afrontó la rebelión de Lucifer: "¡¿Quién como Dios?!... Nadie como Dios!".
Para recuperar la comunidad, no medió ningún trabajo psicológico, ni sociológico, ni campaña publicitaria alguna.
El sacerdote Wilson Salazar se entregó a orar mientras daba testimonio de cristianismo. El dice: "Ofrecí a Dios la problemática de este lugar y puse en sus manos el futuro de la Iglesia aquí".... "Entendí que de rodillas ante El resolvería cualquier situación..."