Mártir de Cristo Rey. Los Cristeros defendieron la fe católica y proclamaron que Cristo es Rey de la patria. Ellos dieron su sangre por la verdad que todo está bajo su dominio. Creer en Jesús es creer …Más
Mártir de Cristo Rey.
Los Cristeros defendieron la fe católica y proclamaron que Cristo es Rey de la patria. Ellos dieron su sangre por la verdad que todo está bajo su dominio. Creer en Jesús es creer en su realeza y su reinado. Todo ha sido creado por Él y para Él. El rechazo del reinado de Cristo es el pecado que más ofende a Dios. El mensaje de Fátima se puede resumir como mensaje urgente a someternos bajo el imperio de Cristo. Si Cristo es Rey, hay que adorarlo y hay que obedecer sus leyes y enseñanzas; hoy día, especialmente respeto al matrimonio, la ley moral, y la recepción de los sacramentos. En 1917, (1) la Virgen se apareció in Portugal y hablo de los errores de Rusia y su conversión futura; (2) la revolución bolchevique persiguió la iglesia y fe verdadera; (3) y en México se instituyo una nueva constitución, producto de la revolución y documento anti-Católico. En 1929, Dios pidió la consagración de Rusia y, por la gracia de Dios, José Luis Sánchez del Rio (13 años) fue un mártir de la Cristiada. ¡Que Viva Cristo Rey!
Los Cristeros defendieron la fe católica y proclamaron que Cristo es Rey de la patria. Ellos dieron su sangre por la verdad que todo está bajo su dominio. Creer en Jesús es creer en su realeza y su reinado. Todo ha sido creado por Él y para Él. El rechazo del reinado de Cristo es el pecado que más ofende a Dios. El mensaje de Fátima se puede resumir como mensaje urgente a someternos bajo el imperio de Cristo. Si Cristo es Rey, hay que adorarlo y hay que obedecer sus leyes y enseñanzas; hoy día, especialmente respeto al matrimonio, la ley moral, y la recepción de los sacramentos. En 1917, (1) la Virgen se apareció in Portugal y hablo de los errores de Rusia y su conversión futura; (2) la revolución bolchevique persiguió la iglesia y fe verdadera; (3) y en México se instituyo una nueva constitución, producto de la revolución y documento anti-Católico. En 1929, Dios pidió la consagración de Rusia y, por la gracia de Dios, José Luis Sánchez del Rio (13 años) fue un mártir de la Cristiada. ¡Que Viva Cristo Rey!