Cardenal Brandmüller afirma: “Nunca” hubo una Misas de todos los tiempos

No está permitido “demonizar ningún desarrollo litúrgico” en nombre de una “Misa de todos los tiempos” que “nunca existió”, demoniza el cardenal de los Dubia, Walter Brandmüller, el 9 de diciembre en Die-Tagespost.de, una posición que nadie ha tomado nunca.

Describe a los “progresistas” y “tradicionalistas” litúrgicos como “peleadores” y, curiosamente, se sitúa en una posición intermedia entre sus puntos de vista, a los que considera erróneos. Brandmüller siempre ha sido un seguidor del conformismo litúrgico del Nuevo Rito.

Cualquier polémica litúrgica es para él una “contradicción grotesca” hacia la voluntad del Señor, que habló con tanta fuerza en la “institución de la Eucaristía” de la "unidad de los suyos con Él y de ellos entre sí”. Brandmüller pasa por alto el hecho de que las “polémicas litúrgicas” solo comenzaron con la revolución del Novus Ordo y desde entonces nunca han cesado.

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Suponiendo una separación maniquea de forma y contenido, moraliza que la “forma” no es crucial en la liturgia, sino la “conciencia, el cuidado, la devoción y la dignidad" con que se realiza. Argumentos subjetivistas de este tipo pueden utilizarse para justificar cualquier tipo de liturgia, incluidos los shows de Amazon o los de os homosexuales.

Para Brandmüller, la “discordia litúrgica” en el interior de la Iglesia la debilita, pero en las moribundas parroquias diocesanas el Novus Ordo reina sin oposición alguna.

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