Campaña "Pequeños Reyes Magos" Los Cantores de la Estrella (en alemán Sternsingers) es una tradición cristiana alemana, aunque se da también en otros países del centro y norte de Europa, como Austria …Más
Campaña "Pequeños Reyes Magos"
Los Cantores de la Estrella (en alemán Sternsingers) es una tradición cristiana alemana, aunque se da también en otros países del centro y norte de Europa, como Austria. Son grupos de niños que el 6 de enero, fiesta de la Epifanía del Señor, se disfrazan de Reyes Magos y portan una estrella. La estrella simboliza a la estrella de Belén, que guió a los Reyes hasta el portal de Belén, donde había nacido el Niño Jesús. Estos niños son bendecidos por el sacerdote de la parroquia que los envía, y van cantando villancicos o recitando poesía de casa en casa, con el fin de recaudar limosna para los pobres.
Otra tarea de la que se han de encargar estos niños en la Epifanía es bendecir las casas por donde pasan. Con unas tizas bendecidas, escriben una curiosa inscripción en la puerta. Primero, las dos primeras cifras del año, y tras ellas un asterisco, que simboliza la Estrella de Belén. Después unas siglas (C+M+B+) separadas por tres cruces que representan a la Santísima Trinidad. Por última escriben las dos últimas cifras del año. Y así es como sería la inscripción del año 2017: 20*C+M+B+17. Esto se ha de dejar escrito hasta Pentecostés o bien hasta que la lluvia lo borre, pero ya hay personas que prefieren dejarlo para siempre, poniendo placas de todos los años en los que la casa fue bendecida o en vez de placas usan pegatinas. Se trata de una costumbre muy arraigada en Alemania y es algo común el ver casi todas las casas con sus puertas marcadas.
Los Cantores de la Estrella (en alemán Sternsingers) es una tradición cristiana alemana, aunque se da también en otros países del centro y norte de Europa, como Austria. Son grupos de niños que el 6 de enero, fiesta de la Epifanía del Señor, se disfrazan de Reyes Magos y portan una estrella. La estrella simboliza a la estrella de Belén, que guió a los Reyes hasta el portal de Belén, donde había nacido el Niño Jesús. Estos niños son bendecidos por el sacerdote de la parroquia que los envía, y van cantando villancicos o recitando poesía de casa en casa, con el fin de recaudar limosna para los pobres.
Otra tarea de la que se han de encargar estos niños en la Epifanía es bendecir las casas por donde pasan. Con unas tizas bendecidas, escriben una curiosa inscripción en la puerta. Primero, las dos primeras cifras del año, y tras ellas un asterisco, que simboliza la Estrella de Belén. Después unas siglas (C+M+B+) separadas por tres cruces que representan a la Santísima Trinidad. Por última escriben las dos últimas cifras del año. Y así es como sería la inscripción del año 2017: 20*C+M+B+17. Esto se ha de dejar escrito hasta Pentecostés o bien hasta que la lluvia lo borre, pero ya hay personas que prefieren dejarlo para siempre, poniendo placas de todos los años en los que la casa fue bendecida o en vez de placas usan pegatinas. Se trata de una costumbre muy arraigada en Alemania y es algo común el ver casi todas las casas con sus puertas marcadas.
El inicio de la campaña
En 1843, una niña nacida en una familia noble de Aachen llamada Auguste von Sartorius, quedó sensibilizada con las noticias sobre niños carentes y en peligro de vida en China y África.
Cuando tenía casi 14 años, decidió recoger dinero con los amigos y parientes para resolver la situación de los niños en el mundo.
Después de algunos años, la práctica fue retomada en …Más
En 1843, una niña nacida en una familia noble de Aachen llamada Auguste von Sartorius, quedó sensibilizada con las noticias sobre niños carentes y en peligro de vida en China y África.
Cuando tenía casi 14 años, decidió recoger dinero con los amigos y parientes para resolver la situación de los niños en el mundo.
Después de algunos años, la práctica fue retomada en 1959 como una acción de solidaridad que sucede hasta hoy, organizada por la Kindermissionswerk, beneficiando proyectos con niños de diversos países y despertando así, en los propios pequeños, una actitud misionera.
Próximo al día 6 de enero, cerca de 500 mil niños alemanes, entre 8 y 13 años, de 12.5 mil parroquias, salen por las calles como Sternsinger, también conocidos como los "Cantores de la Estrella".
Vestidos como Reyes Magos, los pequeños llevan al frente una estrella y marcan en las casas por donde pasan la sigla "C+M+B", que en latín significa "Christus Mansionem Benedicat" (Cristo bendiga este hogar).
Después de cantar y bendecir las residencias, ellos recaudan dinero para los niños y jóvenes vulnerables del mundo.
Actualmente, los niños alemanes auxilian la Pastoral del Niño Internacional, contribuyendo para actividades en Filipinas, Guatemala y Panamá. A futuro, tiene la intención de ayudar a los jóvenes de países africanos y de otros lugares de América Latina y el Caribe. (LMI)
De la redacción Gaudium Press, con información de la Diócesis de Colatina.
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