10:50
Yugo
244
La Biblia Lo Dice El Mundo Va a terminar pronto. La Biblia Lo Dice El Mundo Va a terminar prontoMás
La Biblia Lo Dice El Mundo Va a terminar pronto.

La Biblia Lo Dice El Mundo Va a terminar pronto
Yugo
La Biblia Lo Dice El Mundo Va a terminar pronto
Yugo
MENSAJE DEL SEÑOR A ROSARIO ARENILLAS
CRUZ BLANCA 14 DE FEBRERO DE 1987.

Rosario:– ¡Padre mío, Padre mío!... No estoy cansada de Ti, Padre mío, pero es que ya no puedo más.
Cada día todo es más complicado, Padre mío... ayúdame y no me abandones nunca, Padre mío.
Señor:– Hijos Míos, estoy en todo momento atento a vuestras plegarías... pero quiero que el hombre Me escuche a Mí también, pues …Más
MENSAJE DEL SEÑOR A ROSARIO ARENILLAS
CRUZ BLANCA 14 DE FEBRERO DE 1987.


Rosario:– ¡Padre mío, Padre mío!... No estoy cansada de Ti, Padre mío, pero es que ya no puedo más.
Cada día todo es más complicado, Padre mío... ayúdame y no me abandones nunca, Padre mío.
Señor:– Hijos Míos, estoy en todo momento atento a vuestras plegarías... pero quiero que el hombre Me escuche a Mí también, pues Mis Palabras son muy claras.
YO NO VENGO A LA TIERRA PARA CONFUNDIR A LOS HOMBRES.
Los hombres son LIBRES.
Solamente vengo a deciros que deseo tanto la salvación del hombre... pero el hombre todo lo hace difícil, el hombre cada día va complicándose más y más, y haciendo los caminos más difíciles.
Yo soy "pasivo" (= paciente) el hombre es violento.
El hombre no se da cuenta de que en los momentos de violencia YO NO ESTOY ALLI... PORQUE YO SOY TODO AMOR.
Por eso hijos Míos, quiero deciros que en todo momento seáis "pasivos" (pacientes), que Me comprendáis todos.
Es algo muy importante lo que Yo traigo a la tierra.
No vengo a pedirle nada imposible a ningún hombre... solamente vengo a deciros que aquel que Me quiera seguir, que Me siga, pero que no equivoque los caminos.
SeguirMe a Mí, no produce confusión.
No quiero que ningún hombre se confunda con Mis Palabras.
CADA HOMBRE TIENE UNA GRAN OBLIGACIÓN, Y AQUEL QUE NO CUMPLE SU OBLIGACION, NO PUEDE SER RECIBIDO POR MI PADRE NI POR MÍ.
Tenéis que cumplir con vuestras obligaciones, hijos Míos.
Solamente necesito un momento.
El hombre nunca Me comprende.
Cuando le digo al hombre que si Me quiere seguir que Me siga, debe abandonarlo todo... pero es entonces cuando debe abrazarse más a sus deberes y cuando debe sentirse más responsable para dar ejemplo a sus hermanos.
Quiero que os améis unos a otros... que os comprendáis unos a otros... porque no vengo a la tierra a sembrar CIZAÑA, vengo a deciros que os améis todos unos a otros.
Yo NO SOY EL QUE CONFUNDE A LOS HOMBRES... .eso es obra del enemigo y aún no os dais cuenta de ello, hijitos Míos.
Cuando hayan perdido ustedes el amor, se darán cuenta de que estáis lejos de Mí, y entonces reaccionarán.

Yo he venido a la tierra para salvaros a todos... pero no esperéis milagros de Mí, pues no hago milagros con cosas apegadas a la tierra.
Tendréis el milagro cuando un día vuestros espíritus se despeguen de las cosas de este mundo... entonces verán ustedes el GRAN MILAGRO.
Pero hijos Míos, no confundiros, no, no confundiros, no dejar Mis Caminos, que el enemigo en todo momento quiere apartaros de Mí, no, hijos Míos, no apartaros de Mis Caminos... ¡cuidado!
Cada uno "tenéis" que cumplir con vuestras obligaciones... lo digo como BUEN MAESTRO.
Como PESCADOR DE ALMAS, hermanos Míos, Yo vengo enredado en vuestra red y Me he permitido introducirMe entre vosotros, porque quiero que vosotros quedéis enredados en MI RED que nunca soltaré y que siempre tendré Mis Dedos enredados en estas anillas.
Yo sé que algunos de vosotros vendareis conMigo, hermanos Míos, pero despacio... despacio... que debéis pisar muy firme para que el enemigo en ningún momento pueda apropiarse de la OBRA que habéis hecho para llegar a Mí...
Sé que muchos de vosotros no podéis comprenderMe... estáis llenos de discordias y las discordias producen sufrimiento... y YO no soy sufrimiento... YO SOY AMOR... YO SOY TODO AMOR.
Es el hombre el que confunde. ¿Cuándo os vais a dar cuenta de cuándo una obra es obra de hombres y cuándo es del Padre?
¿No os dais cuenta de que la Obra del Padre es todo Amor, y la obra del hombre es todo discordia?
¡Venid a Mí, hijos Míos! ¿Pero cómo podéis llegar a Mí, dejando el dolor en vuestros hermanos?
En estos momentos, la tierra se va abrasando cada día más, porque el hombre se está confundiendo y es el poder del hombre el que está gobernando en la tierra, y no, el Poder de Mi Padre.
Pero un día os daréis cuenta de lo que habéis perdido
Quisiera dirigirMe a muchos de vosotros aquí presentes, para decirles que ése camino que seguís no es el camino, pero Yo sé que Mis Palabras a veces martirizan el corazón y el sufrimiento que siente un hijo Mío, es un sufrimiento que Yo siento en Mi Corazón.
Por eso hijos Míos, hoy quiero, dirigirMe a alguno en concreto de vosotros... pero tengo tanto que decirles... tengo tanto que decirles... nunca Me cansaré de repetirles que DONDE HAY AMOR ESTOY YO.
DONDE NO HAY AMOR NO ESTOY YO... perdéis la Fe y la Fe no podéis perderla.
Mi Presencia es para unir a los hombres... no para desunirlos.
Rosario:– (Ruega al Señor concretamente por un devoto presente y el Señor se digna dirigirse a él con estas concretas palabras):– Padre, ayuda a J... ayúdale Padre mío para que en todo momento vea la claridad de tus Ojos, como Tú ves sus sentimientos.
Señor:– Hijo mío, solamente hay un camino para llegar a Mí y ese Camino, hijo Mío, no puedes recorrerlo solo, tienes que venir abrazado con muchos hermanos tuyos. No puedes abandonar a nadie para venir a Mí, hijo Mío.
El enemigo quiere confundirte para robarte lo que Yo con tanto amor te he dado, hijo Mío.
Únete a la CRUZ, hijo Mío, y llegarás a la cumbre, pero no te escuches a ti mismo, escucha a aquellos que te rodean.
Yo os he dado ejemplo a todos, pues cuando estuve en la tierra con el sudor de Mi Frente lo conseguí todo, por eso quiero decirte que el sudor de tu frente, un día, te hará llegar a lo más altísimo.
J. hijo Mío, J. hijo Mío no te confundas nunca o perderás tu fe... escúchaMe y abandona la soberbia, que es un deber el abandonarla para santificarse, hijo Mío.
Te he escogido para algo muy importante, pero ni tú mismo lo puedes comprender... por eso hijo Mío no te confundas, para no confundir a los demás.

Es solamente tu conciencia la que un día hablará, porque hoy, las palabras de tu boca no llegarán a ningún lado, hijo Mío.
Será la voz de tu conciencia la que un día escuchará Mi Padre y no olvides nunca, hijo Mío, que la tierra no es tu reino.
Todos tenéis que sobrevivir en la tierra para el bien de los demás, hijo Mío... por eso tienes que manifestarte y dar a conocer Mi Nombre entre tus hermanos... solamente un minuto, un segundo... con eso Me basta.
En el primer capitulo de San Pablo, puedes detenerte un momento y aprenderás muchas cosas... y verás la Luz del Padre.
Porque desgraciadamente en estos momentos viven los hombres en la obscuridad.
(Creo referirse el Señor al Capítulo primero de la Epístola de San Pablo a los Romanos, que es el Primer Capítulo de las Cartas de San Pablo en orden cronológico y en el que se describe la vida animal a que se ha entregado el hombre, por no obedecer Las Leyes del Señor).
Ningún hombre puede abandonar sus obligaciones, porque no seria justo, porque EL TRABAJO ES AMOR, y cuando un hombre está lleno de amor, el trabajo es parte de la Oración.
Rosario:– Entonces Padre mío, qué oraciones más largas me mandas a mí... ¡siempre estoy trabajando!... y ya tengo sesenta años... sí Padre mío, lo hago con amor... por eso, quizás Padre mío, Te ame tanto... ¡tengo tanto que agradecerTe, Padre mío!
DESDE QUE TE TENGO A TI LO TENGO TODO. Tengo la risa y el llanto, pero eso no me importa Padre mío... no me importa... Padre mío, mientras te tenga a Ti de verdad... amo tanto la Verdad que temo que los hombres se confundan y no se den cuenta de que LA VERDAD ESTA CONTIGO.
Ayúdanos Padre mío, para que ninguno de mis hermanos se confunda, que todos se den cuenta de que sin trabajar no podemos llegar a Ti, Padre mío.
Señor:– Todos habéis sido elegidos, hijos Míos, todos pero no adelantaros ninguno a hacer vuestras obras por vuestra cuenta, porque es el Padre, Él que tiene que decir la última palabra.
¿No os dais cuenta hijos Míos, no os dais cuenta de que el ODIO se está filtrando por todos los lugares del edificio que es la OBRA DEL PADRE? (La Iglesia)
– No dudes de Mí, hija Mía, no dudes en ningún momento M. C. hija mía, porque siempre Me tendrás. Yo soy la Verdad y la Luz y no permitiré en ningún momento que la Luz se apague en tus caminos.
Yo te daré la Fe más potente que puedas recibir en estos momentos para que puedas luchar por medio de la claridad de Mi Padre.
No te conformes nunca con la IRA del enemigo, porque el enemigo te quiere arrebatar lo que Yo con tanto amor te he dado.
Ten paciencia y espéraMe. Con serenidad se alcanza todo, con serenidad verás la Luz, hija mía, la Luz que Yo he puesto en tus caminos. Esta bendición que te doy, te servirá de mucha fuerza y para aclarar tantas cosas que se han enturbiado en tu mente humana, pues Yo no permitiré que nada se enturbie en ti, hija Mía.
En estos momentos solamente tenéis una cosa que hacer todos, ORAR Y AMAR.
– ¡Ay F. hijo mío!, hace tanto tiempo que te necesito... quisiera que tu fe siempre estuviera despierta... no te alejes en ningún momento de Mí, porque tú Me has dado tanto, y ahora, que tantos caminos hemos recorrido juntos los dos, no puedes alejarte de Mí.
Ya vamos llegando a la cumbre, a esa cumbre que el hombre se siente tan lejos de élla, pero un día te darás cuenta de que no has perdido el tiempo, tendrás momentos (cambio de cinta)...
(le da una flor, diciéndole): sé que no es blanca pero no te asustes porque este color Me agrada. Yo la quisiera más blanca, para que la blancura se transmitiera a tu alma... sígueMe hijo Mío, sígueMe, sígueMe F. que no estás solo, pues tú serás Luz para el camino de muchos de tus hermanos.
– J. hijo Mío sé que eres amigo Mío y en ningún momento lo puedes dudar... sé que hay momentos en que Me hago presente delante de ti, y es más fuerte Mi presencia que la luz de tus ojos, hijo Mío, pero un día estarás con los ojos cerrados y Me estarás viendo, hijo mío.
¡No callar en ningún momento!... no callar en ningún momento, porque Mi Nombre será vuestro... será vuestro... y ahora quiero dar Mi Bendición para todos... pero quiero que Mi hijo F. (alude al sacerdote residente en este Sagrado Lugar) dé esta Bendición conMigo, para el bien de todos vosotros, hijos Míos, para que puedan ustedes reconocer que no estáis solos, que este pequeño rebaño tiene su pastor hijos Míos... y ahora bendice hijo Mío F.
(El Sacerdote aludido bendice a los presentes)
Rosario:– (Tras unos momentos de silencio)... Padre mío, algo quiero pedirTe Padre mío... por favor que nadie se sienta humillado con Tus palabras Padre mío... dímelo todo a mí... castígame a mí... pero no a mis hermanos Padre mío.
Padre mío, ¿no Te das cuenta de que sufro mucho?
Señor:– ¡ORAD, ORAD, ORAD PARA QUE LAS ALMAS EMPEDERNIDAS EN EL SIGNO DEL ENEMIGO PUEDAN DESPERTAR... ORAD, ORAD!
Rosario:– ¡Adiós Padre mío... adiós... adiós Padre...