¿Se puede tener sexo antes del matrimonio? ¿Por qué no? ¿Se puede tener sexo antes del matrimonio? ¿Por qué no? El placer sexual es bueno. Y no solo bueno, sino muy bueno, es de lo más maravilloso …Más
¿Se puede tener sexo antes del matrimonio? ¿Por qué no?

¿Se puede tener sexo antes del matrimonio? ¿Por qué no?

El placer sexual es bueno. Y no solo bueno, sino muy bueno, es de lo más maravilloso que existe en el Universo. Lo ha creado Dios. Dios podría haber hecho la reproducción sin placer sexual, pero el que nazca un nuevo hombre es algo tan glorioso y tan grandioso y tan importante, que ha querido adornarlo con los oropeles de un placer intentísimo, el más intenso que hay. Cuando un matrimonio se dedica a su función principal, que es concebir a un nuevo hombre, es siempre en colaboración con Dios, que le crea un alma. Es decir, que el traer un hijo al mundo es cosa de tres: de los dos esposos y de Dios: sin que colaboren los esposos, Dios no permite que ese nuevo hombre tenga cuerpo; y sin la intervención directa de Dios, el nuevo hombre surgiría sin alma y sería un animal. Así que el coito sexual en un matrimonio no solo es algo inmensamente maravilloso sino que trascendentalmente es el momento más grande de la historia del Universo cada vez que se produce -en lo que a la historia de las criaturas se refiere-. Además, es una metáfora de la unión de Cristo-Dios con su Esposa Mística, la Iglesia, para formar el Cristo Total.

Así que "el sexo", dicho así, no existe, salvo como pecado, como lujuria, porque si se habla de "sexo" es que se ha desgajado del amor. Lo que existe es únicamente el amor, cuya expresión más propia es el acto físico, que es el que conlleva ese enorme placer que llamamos sexual.

Por tanto, realizar ese acto fuera del matrimonio no tiene sentido y es desviar completamente el proyecto de Dios sobre nosotros. Eso solo es propio de los animales, que no tienen culpa porque no tienen alma ni pueden casarse, y aunque en algunos animales se observan comportamientos nobles que recuerdan a hombres y mujeres buenos, hay otros en los que se nota que son animales y que no están a nuestra altura ni de lejos. Tener "sexo" fuera del matrimonio es como si tu padre te diera dinero para que limpies el jardín, y tú tomaras el dinero y te fueras corriendo. Es ofender a Dios, porque ese acto es fundamentalmente para tener hijos (y también sirve secundariamente como expresión de afecto y comunicación entre los esposos), y si no se hace en el matrimonio ¿en qué contexto iban a nacer esos hijos? No iban a nacer en una familia formada, estable y segura, y muchos lo que hacen es evitar que el niño se conciba, que no es matar a un niño como en el caso del aborto, pero es cerrarle la puerta a Dios en su propia casa, en su propia obra. Triste y desagradable pecado.

Por otra parte, tiene consecuencias humanas muy perjudiciales:

1º._Si en un noviazgo hay sexo, impedirá que conozcas bien a tu novia, aunque parezca lo contrario, ya que puede que te des cuenta de que no es compatible contigo y que haya que romper con ella, pero el sexo te compensa y seguirás con ella. El noviazgo es para saber si hay que romper o saber si esa es la pareja que quiere Dios para ti. Si te casas sin que esa chica sea la que te va, el matrimonio podrá fracasar fácilmente.

2º._Si el noviazgo es normal que se acabe rompiendo porque veas que esa chica no es para ti, que no vas a poder formar una familia con ella a causa de su carácter o de cualquier defecto que tenga (o que rompa ella porque el defecto lo tengas tú), si habéis realizado el acto sexual, cuando esa chica tenga un nuevo novio, va a ver en ella las sombras de otro hombre, pues todas las maravillas físicas, mentales y espirituales de esa mujer que se ponen de manifiesto en el coito, serán como un tesoro usado, como si te compras un Ferrari y te das cuenta de que está usado y ya no puedes fusionarte espiritualmente con él con la misma intensidad (y si esa sensación negativa sucede con un coche, que es un objeto, cuánto más importará con una persona, que es infinitamente más delicada y valiosa). Y otro tanto se puede decir para el hombre, aunque la pureza es más floreciente y brillante en el sexo femenino, pero en realidad está llamada a ella a toda persona independientemente de su sexo. Hay que ser puros y castos, se sea hombre o mujer. Y nuestros modelos son la Santísima Virgen María y San José, que no tuvieron nada en ese sentido jamás, ni en su matrimonio, y es lo que hemos de hacer nosotros salvo los momentos concretos del acto sexual matrimonial, que para los que no tenemos voto de castidad sí nos están permitidos, pero salvo esos momentos, el resto del tiempo tenemos que ser como niños: sexo cero, ni en obras ni en pensamientos. Y si caemos, nos confesamos y vuelta a empezar. Dios perdona siempre, pero lo que no quiere tampoco es que lo tomemos el pelo.

3º._Y no digamos si en vez de hablar de un noviazgo en el que se haga el acto sexual, hablamos de "jugar al amor", es decir, de "estar con esta", "estar con la otra",... romper, "ahora estoy con esta otra, y aquella es mi ex,..." Y ya tenemos al ser humano convertido en un animalito, en una abeja libando de flor en flor, en un perro montando a distintas perras, aunque crea cada vez que esa pareja es para siempre. No. Dios no quiere eso para sus hijos y sus hijas.

4º._Los placeres de la vida conyugal son algo tan hermoso que constituyen una de las principales ilusiones de casarse. Hoy en día muchos novios ya los conocen perfectamente y hasta ya viven juntos. Han desprovisto la boda de la ilusión de las relaciones íntimas, la noche de bodas pierde todo el sentido, es desnaturalizar la boda: ¿para qué vestirse de blanco? ¿para qué convites y viajes nupciales? ¿para qué echar arroz?... si esos nuevos marido y mujer ya lo llevan siendo clandestinamente durante mucho tiempo... Se convierte todo en una farsa social.

5º._El mantenerse castos y puros en el noviazgo, es una prueba que tiene la mujer de que el hombre la quiere de verdad (puesto que el hombre suele ser más ardiente en este sentido). Muchas chicas, al manifestarle a su novio que tanto decía que la amaba, que no quería hacer nada con él hasta casarse, él la ha dejado. El que la amaba hasta el infinito, al poco tiempo la deja porque no puede "divertirse" con ella hasta que se case. Gran prueba es la castidad, que sirve para detectar farsantes. Antiguamente era así, y la supuesta liberación sexual de la mujer ha sido en realidad el mayor ataque machista contra ella, porque ha hecho con engañifas que lo que era una dama se convierta ahora en otra palabra tristemente muy conocida. Dos novios que no cedan a esos impulsos, tendrán una buena base para su futuro matrimonio, porque han sabido controlarse, y en el matrimonio tendrán que hacerlo muchas veces, como cuando surjan tentaciones de infidelidad, que surgirán y muchas.

En resumen y más claro: Según nos enseña la Iglesia Católica: porque Dios no quiere y porque castiga con el infierno a los fornicarios, que son los que hacen eso (aunque como humanos que somos los que leemos aquí, no podemos juzgar a nadie en concreto, solo podemos hablar de cuál es la doctrina cristiana en general, ya que solo Dios puede juzgar a las personas concretas). Dios te ama y tiene otro proyecto para ti, donde esas cosas las harás con la mujer de tu vida, no con la que tú creas en estos momentos que es la mujer de tu vida, sino con la que demuestres que lo es casándote con ella. Y si lo hacéis ahora evitando tener hijos, tampoco, porque Dios ha puesto esas fuerzas en vosotros para que los tengáis, no para que los evitéis, porque eso es como comer y vomitar para no engordar: una asquerosidad a los ojos de Dios y a los de cualquier alma refinada. Con la novia, sexo cero, ni siquiera un beso en los labios, hay que tratarse como hermanos, como si vuestros padres os estuviesen mirando en todo momento aun estando solos. Cuando os caséis, ya podéis con moderación y para tener hijos con paternidad responsable.

"¿No sabéis que los injustos no poseerán el reino de Dios? No erréis, que ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los ladrones, heredarán el reino de Dios." (I Cor 6, 9-10)

"Porque sabéis esto, que ningún fornicario, ó inmundo, ó avaro, que es servidor de ídolos, tiene herencia en el reino de Cristo y de Dios. "(Ef 6, 5)

"Huid de la fornicación. A todo otro pecado que el hombre cometa está fuera de su cuerpo, pero el que practica la fornicación peca contra su propio cuerpo." (Cor 6, 18)

2353 La fornicación es la unión carnal entre un hombre y una mujer fuera del matrimonio. Es gravemente contraria a la dignidad de las personas y de la sexualidad humana, naturalmente ordenada al bien de los esposos, así como a la generación y educación de los hijos. Además, es un escándalo grave cuando hay de por medio corrupción de menores. (Catecismo de la Iglesia Católica)