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Tardes culturales en el Proyecto Hombre. Tardes culturales en el Proyecto Hombre Mario Clavell es un maestro jubilado que colabora, en Santiago de Compostela, con el Proyecto Hombre, una organización …Más
Tardes culturales en el Proyecto Hombre.

Tardes culturales en el Proyecto Hombre
Mario Clavell es un maestro jubilado que colabora, en Santiago de Compostela, con el Proyecto Hombre, una organización formada por 26 Centros que atienden anualmente, en toda España, a más de 20.000 personas con problemas de adicciones y a sus familias.


08 de abril de 2013


Mario colabora en Proyecto Hombre desde hace varios años.
- ¡Gracias!, y hasta la próxima.
Así despidieron, a principios de este mes de marzo, al último ponente, un conocido fotógrafo de la prensa regional: "estuve muy a gusto con ellos; estaban muy interesados. No suelo encontrar tanto interés por mi trabajo", comentaba al finalizar la sesión.

La "próxima" sesión será el mes que viene, cuando un nuevo invitado venga a dar una charla-coloquio en “Las Cernadas”.

Satisfacción de trabajar para otros
Tengo la fortuna de poder colaborar como voluntario en el Proyecto Hombre Galicia, y procuro hacer partícipe de esta tarea a mis amigos. Una tarde al mes voy con un invitado a la Comunidad Terapéutica "Las Cernadas" (Val do Dubra, a trece kilómetros de Santiago), donde varias decenas de personas reciben atención para salir de la droga.

La versatilidad del Programa permite que cada voluntario colabore de acuerdo con sus propias habilidades. Para mí es un trabajo ideal, pues soy profesor jubilado, tengo tiempo, conocidos... gente positiva que puede estimular a los residentes.

Cada invitado habla de su trabajo: - Gracias a la vosotros, chicos, por haberme escuchado con tanta atención, ¡ánimo, sois unos campeones!, se despedía Héctor, oficial de la Armada, que hablé de la necesidad de perseverar para salir adelante en la vida.

Sesión con el músico y compositor Amador Santos.
A las cinco de la tarde tenemos la charla introductoria y, después, la tertulia que, a veces, hay que acabar por las bravas: ''señores, son las siete, tenéis cosas que hacer... última pregunta''. -Buuuh! ¡dos más..!

Amador, director jubilado de la Banda Municipal y compositor, bajó un día conmigo para hablar de música y ya lleva más de dos años colaborando en el Proyecto: Pone y comenta una audición el último sábado de cada mes: -"Están interesadísimos con la música que les pongo, y yo disfruto tanto como ellos".

"Vuelvo muy a gusto, que lo sepas: tengo hijos adolescentes, me anima ver salir de conductas de riesgo a estas personas", dice José Miguel, profesor de Historia medieval, "pienso que son mis hijos cuando voy allí".

El periodista Juan Vicente Boo, en noviembre de 2011.
Cada uno encuentra su modo de colaborar: Historiadores, biólogos, físicos, poetas, músicos, pintores, viajeros, médicos, compositores, economistas, empresarios, geólogos, meteorólogos, marinos, actores, radiofonistas, fotógrafos. Muchos invitados han pasado por "Las Cernadas" y todos aceptan con gusto participar de nuevo. "Es por la satisfacción de dedicar tiempo y conocimientos a cambio de nada, por el gusto se sentirse útil", reconoce Javier, un físico de partículas que hace una visita anual a la "Las Cernadas".

Los internos y participantes del Programa permanecen atentos, intervienen... y son muy agradecidos: "¡más que en mis clases!" -observa divertido Julio, Profesor de Arte. Y también afirma Fernando, compositor de música sinfónica contemporánea: "no encuentro fácilmente un público tan receptivo y sensible".

Voluntarios junto a profesionales
Los residentes en "Las Cernadas" están en fase de reinserción, deseosos de salir de la adicción en la que cayeron. Los voluntarios intentan mostrar un mundo laboral, artístico, profesional constructivo que les ayude a luchar para salir del agujero en el que cayeron. -"¡Hey! -me saluda Cristiano por la calle- estoy trabajando en una hípica; acabé el Programa; las sesiones con Chicho, me ayudaron a salir adelante". Chicho es un actor televisivo muy popular; habló de la perseverancia para encontrar un hueco laboral.

Con Manuel Borobio, arquitecto

El Proyecto Hombre está integrado en un marco internacional y es una iniciativa de la Iglesia católica con presencia en veinte países del mundo. Los invitados lo saben y entienden que su participación es una obra de misericordia de esas que recoge el Compendio del Catecismo de la Iglesia católica: enseñar, consolar, visitar...

Un lugar de donde todos salimos ganando
Gracias a mi vocación al Opus Dei aprendí que parte de la esencia de la vida cristiana consiste en fomenta la sensibilidad hacia las necesidades de los demás. Ahora, jubilado, con tiempo libre, encuentro en mi colaboración con el Proyecto Hombre un espacio que me permite servir a personas necesitados siendo yo mismo el primer beneficiado, en este voluntariado salimos todos contentos: los "ponentes" invitados, los residentes de "Las Cernadas"... y también yo.