DIOS, ES UN DIOS DE JUSTICIA, UN DIOS DE AMOR Dios sorprende a los incautos, incrédulos y a aquellos que carecen de Fe, que no tienen la convicción de seguir a Jesús conforme sus enseñanzas y sabiduría. …Más
DIOS, ES UN DIOS DE JUSTICIA, UN DIOS DE AMOR
Dios sorprende a los incautos, incrédulos y a aquellos que carecen de Fe, que no tienen la convicción de seguir a Jesús conforme sus enseñanzas y sabiduría.
Otros reconocen la grandeza de Jesucristo, pero no quieren adherirse a Él. La discrepancia que suscita Jesús se da en todas las generaciones, aceptaciones y negaciones, y ahí viene la lucha entre el bien y el mal de pensamientos, ideas, amor y entrega de corazón frente a la levadura de los fariseos.
Las desavenencias en lo personal, en la familia, en la sociedad, etc., van causando conflictos de Fe, pero Jesús nos ha enseñado a creerle para ser salvos y los que no le creen ya están condenados.
Dios sorprende a los incautos, incrédulos y a aquellos que carecen de Fe, que no tienen la convicción de seguir a Jesús conforme sus enseñanzas y sabiduría.
Otros reconocen la grandeza de Jesucristo, pero no quieren adherirse a Él. La discrepancia que suscita Jesús se da en todas las generaciones, aceptaciones y negaciones, y ahí viene la lucha entre el bien y el mal de pensamientos, ideas, amor y entrega de corazón frente a la levadura de los fariseos.
Las desavenencias en lo personal, en la familia, en la sociedad, etc., van causando conflictos de Fe, pero Jesús nos ha enseñado a creerle para ser salvos y los que no le creen ya están condenados.