Lo primero que debemos entender es que "anti" viene del griego ἀντί (antí), que significa "contra". 1) Porque el protestantismo necesita del anticatolicismo para justificar su propia existencia. Es decir, el protestantismo sin el anticatolicismo no tiene razón de ser. El protestantismo depende totalmente del anticatolicismo para existir y mostrarse relativamente creíble delante de los hombres. 2) Porque el protestantismo protesta CONTRA la Iglesia de Cristo y se separa de Ella. San Juan dice que aquellos que se separan son "anticristos" y no pertenecen a la Iglesia de Cristo (1Jn 2.18-19). "ANTICRISTO", del griego ἀντίχριστος (antíjristos), ἀντί (antí) "contra", y χριστός (jristós) "Cristo", es decir, "CONTRA-CRISTO". Y Jesús dijo: "Y el que no esta CONTRA nosotros (Cristo es uno con la Iglesia), está con nosotros." (Mr 9.40) Ahora bien, ¿el protestantismo está a favor o en contra de la Iglesia Católica? ¿Sencillo, no? Rechaza a la Iglesia es rechaza a Cristo (Mt 10.40; Lc 10.16; Mt 18.17; 10.14), porque Cristo se ha hecho UNO con Su Iglesia (Ef 5.31-32) y lo que Dios ha unido no lo puede separar el hombre (Mc 10.9). Lamentablemente muchos hombrecitos en la historia han creído tener tal potestad. 3) Porque el protestantismo esta en CONTRA de las palabras de Cristo. Jesús dijo "habrá un solo rebaño" (Jn 10.16), y el protestantismo funda cada día nuevos rebaños. Jesús dijo "este es mi cuerpo... esta es mi sangre" (Mt 26.26-28), y el protestantismo dicen que no lo es. Jesús le dió potestad a Su Iglesia para perdonar los pecados (Jn 20.23), y el protestantismo lo niegan. Jesús dijo que las puertas del infierno no prevalecerán en contra de Su Iglesia (Mt 16.18), y el protestantismo dice lo contrario, por eso funda nuevas "iglesias". Jesús dijo que Él estaría con Su Iglesia todos los días hasta el fin del mundo (Mt 28.20), y el protestantismo dice que Él abandonó a Su Iglesia por "pecadora". 4) El protestantismo es anticristo porque rechaza la divinidad y la mesianidad de Cristo (ya escucho el sonido de esas vestiduras que se rasgan). Porque el protestantismo para justificar su propia existencia debe reconocer, consciente o inconscientemente, que Cristo no ha podido cumplir con sus promesas hechas a Su Iglesia. En definitiva, si Cristo no ha podido cumplir con sus promesas dejaría de ser Dios, y también dejaría de ser el Mesías esperado, como dice la Escritura: "Quizá te preguntes en tu corazón: «¿Cómo podremos saber si una palabra no la ha pronunciado el Señor?» Si lo que dice el profeta en nombre del Señor no sucede ni se cumple, esa palabra no la ha pronunciado el Señor. El profeta ha hablado presuntuosamente: no le temas." (Dt 18.21-22) "Dios no es como los mortales: no miente ni cambia de opinión. Cuando Él dice una cosa, la realiza. Cuando hace una promesa, la cumple." (Nm 23.19) En pocas palabras, creer en el protestantismo es rechazar a Jesucristo como Dios y como Mesías.
Jesús dijo "habrá un solo rebaño" (Jn 10.16), y el protestantismo funda cada día nuevos rebaños. 