El cardenal Angelo Comastri, que tiene 77 años, está a punto de dejar su puesto como arcipreste de la basílica más conocida del mundo, San Pedro del Vaticano, tras 15 años al frente.
Según ha podido saber InfoVaticana, el Papa Francisco ha cesado ya al purpurado, algo que se hará oficial la próxima semana. El encargado de la iglesia más importante de la Cristiandad quedará vacante, a la espera del recambio que el Santo Padre tenga en mente.
Ya comentamos en septiembre de 2020, que se acercaba el momento de prescindir de algunos cardenales curiales, entre ellos, Comastri: Lorenzo Baldisseri, secretario del Sínodo -que ya ha sido jubilado-, Robert Sarah, prefecto del Culto Divino -cumplió 75 hace poco-, Beniamino Stella, prefecto del Clero -cumple 80 en agosto, con lo que el Papa le está apurando hasta el final-, Giuseppe Versaldi, de Educación Católica, etc..
Este año se atisban más relevos en el Vaticano.
Angelo Comastri nació en 1943 en un pueblo cerca de Orbetello y fue ordenado sacerdote a la edad de 24 años, el 11 de marzo de 1967.
El 25 de julio de 1990 fue nombrado obispo de Massa Marittima-Piombino, recibiendo la ordenación episcopal el 12 de septiembre de ese mismo año a cargo del cardenal Bernardin Gantin.
Renunció al gobierno pastoral de la diócesis por motivos de salud el 3 de marzo de 1994. Después de su recuperación, fue nombrado presidente del Comité Nacional Italiano para el Jubileo del año 2000 y responsable de Centro Nacional para Vocaciones de la Conferencia Episcopal Italiana.
Fue nombrado Prelado de Loreto y delegado pontificio para el santuario Lauretano, y promovido al rango de arzobispo el 9 de noviembre de 1996.
En 2005 fue nombrado coadjutor del arcipreste de la Basílica de San Pedro en el Vaticano, Vicario general de Su Santidad para el Estado de la Ciudad del Vaticano, y presidente de la Fábrica de San Pedro en 2005.
Predicó los Ejercicios Espirituales por Cuaresma para el Papa Juan Pablo II y la Curia Romana y redactó las meditaciones del Via Crucis presidido por el Papa Benedicto XVI en el Coliseo Romano el Viernes Santo de 2006.
Fue nombrado arcipreste de la Basílica de San Pedro el 31 de octubre de 2006, sustituyendo al cardenal Francesco Marchisano.
Creado cardenal diácono en el Consistorio del 24 de noviembre de 2007, por Benedicto XVI, recibió la birreta roja y la Diaconía de San Sanvador en Lauro.
