MARTIROLOGIO ROMANO: 12 DE DICIEMBRE.
—San Sinesio, mártir, en Roma; el cual ordenado de lector en tiempo del papa san Sixto, habiendo convertido a muchos a Jesucristo, fue acusado ante el emperador Aureliano, y siendo degollado alcanzó la corona del martirio.
—los santos mártires Epimaco y Alejandro, en Alejandría, los cuales en tiempo del emperador Decio, después de haber padecido una larga prisión y diversos géneros de tormentos, vista su gran constancia en la fe, fueron sentenciados a ser quemados vivos.
—Los Santos mártires Maxencio, Constancio, Crescencio, Justino y sus compañeros, en Tréveris; los cuales en la persecución de Diocleciano padecieron por sentencia del presidente Riccio Varo.
—En Quimper-Irlanda, san Corentino, primer obispo de aquel lugar.
—En el país de Vimeu en Picardía, el tránsito de san Valeri, abad, discípulo de san Columbano. Fué hijo de un caballero de Auvernia, y cuando niño era pastor de ganados. Después fué adelantando en el camino de la perfección, y habiéndose dedicado al servicio de Dios, ocupaba todo el tiempo en predicar, orar, leer y trabajar en labores manuales: murió en 622.
Entretanto, se había difundido por el pueblo la fama de esta maravilla, y los vecinos acudían a venerar la imagen al oratorio del obispo. Después fué colocada en un altar de la catedral, donde estuvo mientras se edificó una ermita en el lugar que había señalado el indio, a la cual fué trasladada luego con procesión y fiesta solemne. Posteriormente, en el año 1622, a poca distancia de la ermita antigua se edificó un templo suntuoso, donde todavía se venera la santa imagen de nuestra Señora, que bajo dicho título de Guadalupe es patrona de todo el reino de Nueva España.
—Y en otras partes se hace la fiesta y la conmemoración de otros muchos santos Mártires, Confesores y santas Vírgenes.
Alabado y glorificado sea Dios eternamente.
AÑO CRISTIANO
POR EL P. J. CROISSET, de la Compañía de Jesús. (1864).
Traducido del francés. Por el P. J. F. de ISLA, de la misma Compañía.