Rezar por la llegada al Cielo de las benditas almas del Purgatorio.

Breve oración -dictada por el mismo Jesús a santa Gertrudis- que conviene aprender y repetir con devoción y gran fe muchas veces cada día. Rezar por la llegada al Cielo de las almas que se encuentran en el Purgatorio es una importante obra de misericordia al alcance de todos, en cualquier momento y circunstancia, que agrada mucho a Dios. Recordemos que ellas ya no pueden pedir por sí mismas, ni merecer, mientras que nosotros podemos enriquecerlas con numerosas indulgencias cada día, adelantando así su gozoso, definitivo y anhelado encuentro con el Señor y su Gloria. Pensemos también que hay almas muy olvidadas, por familiares que no creen o que incluso puedan llegar a pensar que no había ninguna esperanza de salvación para ellas. También podemos adelantar y abreviar la purificación de las que les esperaría mayor sufrimiento sin nuestra ayuda...
Recemos, ofrezcamos sacrificios y nuestras obligaciones por ellas. Acordémonos, como nos gustaría que se acordaran de nosotros. Ellas, sin duda, lo hacen ya por todos nosotros y, con más motivo, si las socorremos diligentemente, movidos por la caridad espiritual a la que nos debería llevar la unión en el amor.
Por todo ello, reza frecuentemente esta sencilla y corta oración por todas las benditas ánimas del Purgatorio.
Quizá sea lo más importante que hagas hoy, sin ser plenamente consciente de ello...