"El Bergoglismo Contra la Presencia Real"

adeste fideles

15 sept 2017

Este tiempo tenía que llegar lo importante es que los hijos de Dios no caigan en el engaño, que recuerden que estaba anunciado, Nuestro Señor Jesucristo nos lo había advertido.

apostolesdemaria

215 sept 2017

Es triste, pero en muchos lugares ya no consagran el Cuerpo de Nuestro Señor… la apostasía es terrible y evidente, que hay que dudar de la intención de estos protestantes.

En el futuro inmediato qué caso tendría ir a una misa donde ya Nuestro Señor Jesucristo haya sido echado fuera? (de hecho pensamos que quizá ya hay templos donde no se encuentra el Señor) La Iglesia fiel tal vez será principalmente extramuros.

adeste fideles

15 sept 2017

Sí Padre apostolesdemaria , todo un plan para echar fuera a Jesucristo de su propia Iglesia edificada por Él! = La supresión del Santo Sacrificio del Altar= Dios tenga piedad de nosotros, amén.

apostolesdemaria

215 sept 2017

Este es un ensayo o un ejemplo de lo que Bergoglio quiere para toda la Iglesia, claro, su iglesia, por que los Católicos rechazamos el falso ecumenismo, el sincretismo, etc.

adeste fideles

15 sept 2017

Ahora ya es costumbre que, una vez al mes, el grupo se encuentre en una iglesia católica, luterana, valdense o bautista para compartir la eucaristía, participando en el culto o en la misa- conforme a la liturgia de la iglesia anfitriona- y colaborando con funciones diversas en la celebración. Distribución de la comunión, lecturas y comentario de la palabra se volvieron así ocasiones de convivencia …Más

Ahora ya es costumbre que, una vez al mes, el grupo se encuentre en una iglesia católica, luterana, valdense o bautista para compartir la eucaristía, participando en el culto o en la misa- conforme a la liturgia de la iglesia anfitriona- y colaborando con funciones diversas en la celebración. Distribución de la comunión, lecturas y comentario de la palabra se volvieron así ocasiones de convivencia ecuménica..

adeste fideles

15 sept 2017

No se requiere para vivir juntos este evento, la adhesión a un “pensamiento único” sobre la eucaristía, sino más bien el respeto de todos por el pensamiento de cada uno.