ESPAÑA SIGUE SIENDO UNA POTENCIA MUNDIAL MISIONERA
Domund, el Domingo Mundial de las Misiones"España es el país con más misioneros, seguimos siéndolo.
Tenemos casi 7.000 misioneros trabajando en la evangelización", ha asegurado José María Calderón, director de Obras Misionales Pontificias (OMP) en España, en vísperas del Domund, el Domingo Mundial de las Misiones que se celebra este fin de semana y requiere la generosidad de todos. De ellos, un 53% son mujeres, detalló.
Pero hay que matizar esas cifras. De esos 7.000, casi 1.000 están en España, haciendo animación misionera, formaciones o recuperándose por temas de salud, al tener muchos una edad muy avanzada. Y hace 15 años, en 2009, OMP hablaba de 17.000 misioneros españoles por el mundo.
Simplemente, muchos eran ancianos y fueron muriendo en estos años.
Si España sigue siendo el país con más misioneros, significa que el resto de países no está creciendo mucho.
José María Calderón señala, sin embargo, que los españoles siempre son generosos con las misiones a través de sus donativos a Obras Misionales Pontificias.
De hecho, España es el segundo país donde más se recauda para misiones a través de OMP: casi 9 millones de euros el año pasado, sólo superados por Estados Unidos.
Desde Roma se distribuye ese dinero (a nivel mundial OMP recaudó 61 millones el año pasado) entre los 1.126 territorios de misión, estén en la Amazonía, Sudán o Papúa Nueva Guinea.
En la presentación del Domund ante la prensa, ha hablado Jorge Naranjo, misionero comboniano en Sudán desde hace 16 años.
En abril de 2022 estalló la guerra en Sudán, muchas embajadas cerraron, muchas ONGs se marcharon, el país se dividió en fracciones. La Iglesia y los misioneros siguieron allí, incluso siendo Sudán un país de mayoría musulmana.
Hoy en las zonas bajo el control del ejército sudanés, la vida de las parroquias sigue funcionando con más o menos normalidad. Pero en las zonas bajo el control de milicias todo es desconcierto e inseguridad. Muchos milicianos se dedican al saqueo y a causar destrozos. Más de 10 millones de personas se han desplazado a otras zonas. "Es el conflicto que ha provocado más desplazados, más que Ucrania o Siria", destaca Jorge Naranjo.
En Jartum, la capital sudanesa, quedan tres sacerdotes que consiguen moverse entre las aldeas para celebrar la Eucaristía y los catequistas locales siguen reuniendo a los pocos fieles que quedan para rezar.
En El Obeid, ciudad rodeada de milicias, el Obispo sigue viajando a las comunidades en transporte público, para mantener viva la Iglesia, con el riesgo que eso conlleva: una vez le pegaron y le robaron el anillo episcopal, explica el misionero. La catedral recibió el impacto de dos misiles en 2023.
Jorge Naranjo dirige la pequeña y joven Universidad Católica de Jartum (el Comboni College). Muchos de sus alumnos "salieron de sus casas a punta de pistola, y no pudieron coger los certificados que les permitirían seguir adelante con sus estudios en otros lugares", señala. Hoy les ofrecen formación online.
Además, decenas de alumnos se arriesgan a acercarse a Port Sudán para estudiar enfermería, que requiere presencialidad, y ya tiene creado un programa de voluntarios de cuidados paliativos, en el que colaboran cristianos y musulmanes.
El misionero dice que la misión es como una esposa: "Cuando vas a un pueblo te ‘casas’ con él y lo compartes todo", explica. Un misionero puede ver como se destruye mucho de lo que ayudó a construir pero apoyado en Dios evita la frustración. "Están siendo los años más felices de mi vida misionera", señala Naranjo.
El Padre Jorge Naranjo habla de su experiencia en Sudán, país aún en guerra: (vídeo al final del artículo)
Misionera con los Pigmeos
De familia neocatecumenal, misionera con los pigmeos: no quería «selva y bichos» pero Dios la llevó
Lucía Fonts Santana es una joven misionera comboniana, española nacida y educada de pequeña en Holanda, que vive en República Centroafricana entre los pigmeos, un pueblo atacado a menudo por sus vecinos para utilizarlos como mano de obra semi-esclava.
"La misión ad gentes es algo que siempre he escuchado y he conocido familias misioneras", explica. Su padre también trabajó en África y en parte le contagió el interés por la misión.
De San Daniel Comboni, el obispo que fundó los combonianos para evangelizar en África, aprendió que "el misionero que no tuviera un fuerte sentimiento de Dios acabaría encontrándose con un vacío insoportable en las misiones, porque al final en las misiones te encuentras con con situaciones muy duras y de mucha soledad. Necesitas estar lleno de Dios".
Primero se formó en Esmeraldas, Ecuador, trabajando con indígenas y con afrodescendientes. "Tengo un gusto especial por esas zonas que están muy, muy alejadas, que es difícil llegar y te encuentras personas muy sencillas muy en contacto con la naturaleza y que viven de lo que la naturaleza les da, con agricultores, personas que saben cazar, pescar, con una capacidad impresionante de recibir el Evangelio", explica.
Las combonianas tienen allí un pequeño hospital que atiende gratis a los pigmeos. "Somos cuatro. La mies es mucha, los obreros pocos. Si hay alguna chica que quiera ser misionera: no te lo pienses mucho, porque trabajo hay muchísimo, déjate hacer, acompáñame, el Señor sigue llamando".
Entre los retos, el idioma, en este caso el idioma sango. Y situaciones de miseria, "niños que mueren en mis manos, que dices 'este niño, si estuviera en un sitio donde hay medicamentos, lo podríamos haber salvado'". Vio también los abusos contra los pigmeos, que "son utilizados como mano de obra barata y casi semiesclavitud".
También vivió experiencias de acompañamiento y fe. Una mujer musulmana, embarazada y con VIH, fue abandonada por su familia. Las religiosas la acogieron y cuidaron. Fue ella la que intrigada pidió la catequesis y se bautizó antes de morir. "Nuestro contacto con las personas, no sabemos cómo, misteriosamente despierta algo en ellas", explica Lucía. Misionera con los Pigmeos
Misionero en Cracas
Guillermo pasó una década sacando chicos de las bandas: «Si abandonaban, tenían los días contados»
Misionero del Camino Neocatecumenal en Caracas: «El trato con los capos frenaba las represalias»
El sacerdote Guillermo María Alberto es el párroco de Santa Teresa en Ceuta (España).
Antes de llegar a la ciudad autónoma estuvo durante una década en Caracas (Venezuela). Donde llevó el Evangelio a algunas de las barriadas más castigadas por la delincuencia.
"Allí actúan muchas bandas que se dedican a la delincuencia y al narcotráfico. Son los que gobiernan. Los puntos de referencia de un joven entre 14 y 16 años son ellas y ser el capo", explica. "La vida de un chico en un barrio de Caracas es muy corta porque se meten en muchos problemas. Después, por los llamados ajustes de cuentas, son ajusticiados", detalla.
El medio que utilizó durante años el padre Guillermo para sacar de la calle a los más jóvenes fue la educación, especialmente, de la mano de la Fundación Ciudad Esperanza. Que imparte cursos de formación profesional para alejar a los chicos de la violencia.
[Su fundador fue el padre Antonio María Zubía, que vivió en Catia, Caracas, desde 1989, junto con dos familias misioneras enviadas por el Papa Juan Pablo II. El resultado de esta labor se ve reflejada en cifras. La zona ha reducido el número de muertes violentas. Ha pasado de 56 en 1996 a una media de tres desde el año 2001].
"Intentábamos enseñarles un oficio, para que el chaval tuviese una esperanza en la vida, y viera que lo más importante no era estar en una banda, sino tener unos valores que le ayudasen a vivir bien", comenta el sacerdote español. Misionero en Caracas
Domund
Los donativos que dan los cristianos concienciados con el Domund y las misiones sirven para todo tipo de obras de evangelización y desarrollo.
En República Centroafricana, como en tantos países, es muy importante formar a los catequistas (pueden estar 4 meses en régimen de internado preparándose), organizar campamentos para los niños, apoyar las escuelas y dispensarios...
El tradicional pregón del Domund en España lo proclama en la tarde de este martes 15 de octubre desde Córdoba el veterano obispo misionero cordobés Juan José Aguirre, que durante muchos años ha impulsado la diócesis de Bangassou en República Centroafricana.
Le presentará el tenista paralímpico Cisco García. Será desde la Santa Iglesia catedral de Córdoba a las 19:30 y se puede seguir desde el YouTube de Obras Misionales.
El viernes 18 se entregan los III Premios misioneros de OMP “Beata Pauline Jaricot” y “Beato Paolo Manna”, que nacieron para distinguir a misioneros e instituciones.
En el espacio All in One de Caixabank se premiará a la religiosa adoratriz Milagros García, misionera en Cabo Verde, por su atención a mujeres víctimas de prostitución y trata,
y a Radio María, por sus 25 años de emisión, acercando a los hogares testimonios misioneros de todo el mundo.
El domingo 20 es cuando se celebra el Domund en sí, en todas las parroquias se reza por la evangelización y la colecta se destina íntegramente al esfuerzo misionero en esos países lejanos y muy necesitados. Domund 2024
VIDEO:
José María Calderón da datos de la vida misionera en España:
VIDEO: El Padre Jorge Naranjo habla de su experiencia en Sudán, país aún en guerra: