Manuel Díaz Madrazo
Manuel Díaz Madrazo

Gran homilía del obispo de Alcalá de Henares en el Oficio de Viernes Santo

Solamente un Judas Iscariote puede estar en contra de las palabras de Monseñor. Conmueven hasta las lágrimas y eso mueven a la difución de la fé y no es posible concebir lo contrario si no a través del demonio. Y paz a los "caídos" porque la misericordia de Dios nos imprime ese sello, cáspita, que revelación.