¿Por qué no se pueden tocar estos temas en una homilía? Un discursito apenas es escuchado. ¿Por qué hay que hablar de que hay que ser buenos en las homilías y dejar lo que realmente interesa a los discursos que nadie escucha?

Gracias, don Juan Antonio Reig porque su homilía es estupenda y no sólo ha hablado de la práctica de la homosexualidad, sino del pecado que deprava al hombre y del más grande amor de Dios que nos redime y nos devuelve la dignidad.

Gracias a Dios que hay obispos como usted que nos sirven de estímulo a muchos curas para seguir predicando la Verdad, aunque muchos traten de callarnos.

No vamos a empezar a predicar ahora según los criterios del mundo... Digo yo.

Además, en ningún momento ha ofendido a nadie, ha hablado de cosas más ciertas que la vida misma y conozco a gente con tendencias homosexuales que tratan de vivir castamente, para ser libres y no animalitos gobernados por sus impulsos. Que agradecen viviamente que se les predique la Verdad.

Un fuerte abrazo