QUIEN ES EL SACERDOTE - PADRE LUIS TORO. Ser sacerdote hoy. Identidad sacerdotal La identidad sacerdotal está en la línea de sentirse amado y capacitado para amar. Esta identidad se reencuentra cuando …Más
QUIEN ES EL SACERDOTE - PADRE LUIS TORO.
Ser sacerdote hoy. Identidad sacerdotal
La identidad sacerdotal está en la línea de sentirse amado y capacitado para amar. Esta identidad se reencuentra cuando se quiere vivir el sacerdocio en todas sus perspectivas o dimensiones:
-Consagración o dimensión sagrada: el sacerdote en su ser, en su obrar y en su vivencia, pertenece totalmente a Cristo y participa en su unción y misión.
-Misión o dimensión apostólica: el sacerdote ejerce una misión recibida de Cristo para servir incondicionalemente a los hermanos.
-Comunión o dimensión eclesial: el sacerdote ha sido enviado a servir a la comunidad eclesial contruyéndola según el amor.
-Espiritualidad o dimensión ascetíco-mística: el sacerdote está llamado a vivir en sintonía con los amores de Cristo y a ser signo personal suyo como Buen Pastor.
El sacerdote está llamado, hoy más que nunca, a ser:
-Signo del Buen pastor en la Iglesia y en el mundo, participando de su ser sacerdotal (PO 1-3).
-Prolongación del actuar del Buen Pastor, obrando en su nombre en el anuncio del evangelio, en la celebración de los signos salvíficos (especialmente la Eucaristía) y en los servicios de caridad (PO 4-6).
-Transparencia de las actitudes y virtudes del Buen Pastor, presente en la Iglesia comunión y misión (PO 7-22).
Ser sacerdote hoy. Identidad sacerdotal
La identidad sacerdotal está en la línea de sentirse amado y capacitado para amar. Esta identidad se reencuentra cuando se quiere vivir el sacerdocio en todas sus perspectivas o dimensiones:
-Consagración o dimensión sagrada: el sacerdote en su ser, en su obrar y en su vivencia, pertenece totalmente a Cristo y participa en su unción y misión.
-Misión o dimensión apostólica: el sacerdote ejerce una misión recibida de Cristo para servir incondicionalemente a los hermanos.
-Comunión o dimensión eclesial: el sacerdote ha sido enviado a servir a la comunidad eclesial contruyéndola según el amor.
-Espiritualidad o dimensión ascetíco-mística: el sacerdote está llamado a vivir en sintonía con los amores de Cristo y a ser signo personal suyo como Buen Pastor.
El sacerdote está llamado, hoy más que nunca, a ser:
-Signo del Buen pastor en la Iglesia y en el mundo, participando de su ser sacerdotal (PO 1-3).
-Prolongación del actuar del Buen Pastor, obrando en su nombre en el anuncio del evangelio, en la celebración de los signos salvíficos (especialmente la Eucaristía) y en los servicios de caridad (PO 4-6).
-Transparencia de las actitudes y virtudes del Buen Pastor, presente en la Iglesia comunión y misión (PO 7-22).