Nulo y sin efecto: Francisco "laiciza" obispos abusadores
El primero es el ex arzobispo de La Serena, Francisco José Cox, de 84 años, miembro del Movimiento de Schoenstatt y a quien Pablo VI nombró obispo en 1974. Cox se jubiló en 1997 y vive en Alemania. En 1981, John Paul II lo nombró secretario del Pontificio Consejo para la Familia, pero Cox renunció tres meses después y fue designado obispo diocesano en Chile. Sus preferencias efusivas por los varones jóvenes fueron evidentes. Nunca tuvo que enfrentar demandas judiciales.
El segundo es el ex obispo de Iquique, monseñor Marco Antonio Órdenes, de 54 años. Ginecólogo, Órdenes se ordenó sacerdote en 1996 bajo la influencia de Juan Pablo II. En el 2006 fue nombrado por Benedicto XVI como el obispo más joven en la historia de Chile. Órdenes abusó presuntamente de Rodrigo Jelcic a inicios de 1997, cuando Jelcic tenía 15/16 años. Posteriormente afirmó que él estaba “enamorado” del obispo. Jelcic fue a la policía en el 2008 después que él descubrió en ese momento que Órdenes tenía otros “amantes” homosexuales.
Al ser obispo como Cox u Órdenes, el Papa nunca recibió de Cristo el poder de “laicizar” a otro obispo. En consecuencia, la medida de Francisco es nula y sin efecto.
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