La iglesia no sólo la conforma la parte jerárquica, pues sí asi fuera tendríamos en la iglesia un simple ejemplo de comunismo totalitario.
La parte seglar es en verdad una de las partes principales que conforman el cuerpo místico de nuestro Señor Jesucristo.
Y por gracias del Espíritu Santo, tienen en los cánones de derechos que rigen la Santa Iglesia,
artículos que le permiten al laico reclamar la fe y doctrina bajo la cual fue bautizado.
Es de mal gusto querer por idolatría o fanatismo, privar al prójimo de los derechos que le atañen.
Sí como miembro de la Iglesia y conociendo, el artículo 1364 del código de derecho canónico, el cual deja iso-facto excomulgado de la Iglesia Católica, a todo aquel que haya incurrido en herejía.
No es necesario, esperar que tome la decisión, de proclamar a dicha persona hereje, cuando según el código de derecho canónico ya lo hizo de manera iso-facta.
1) si tenemos un código de derecho canónico.
2) si tenemos un catecismo doctrinal.
3) si tenemos las directrices que nos marca la doctrina social de la Iglesia.
4) si tenemos una tradición bimilenaria, que de generación en generación hemos recibido conformado un sagrado é intocable Magisterio, dónde se prueban los verdaderos Católicos.
¿porque tengo yo que seder mis derechos que me da mi Santa Madre Iglesia, Ó en su defecto quién soy yo para privar a cualquier miembro de la Iglesia de los derechos que posee.
Caemos en la falsa piedad y catolicidad, queriendo callar la voz del que reclama.
Dijo José Marti, "él respeto al derecho ajeno, es la paz.

No. Lo que me produce sonrisa es que precisamente ocupen ustedes el lugar del antiguo Santo Oficio y hoy Sagrada Congregación para la fe. No les corresponde a ustedes decidir que este cardenal es hereje o no sino a los otros 23 miembros (cardenales y obispos) que se supone que la componen. y que están ahí por decisión del Santo Padre. Ojo!. Müller es un excéntrico pero dejen a los otros que hagan el trabajo de Dios, hombre...

PADRE J.A.FORTEA: "Yo creo que, al final, habrá un cisma en la Iglesia. Por muy bueno que sea el gobierno eclesiástico, veo inevitable ese resultado final. El barco está escorado y el agua sigue entrando. Al final, una iglesia moderna se separará de la obediencia de la Iglesia de los dogmas. En ese futuro conflicto, la fidelidad a Pedro será la clave para saber en qué lado debemos estar. Las mentes más preclaras observaban cómo se aproximaba el conflicto de 1939. El futuro conflicto eclesiástico tiene el carácter de lo inevitable."