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El Pulso de la Fe [21.Enero.2018] Análisis Geopolitica 2018Más
El Pulso de la Fe [21.Enero.2018]
Análisis Geopolitica 2018
Roberto Benavides
LA CRUZADA DE REPARACION
EL INMACULADO CORAZON DE MARIA, PARA ALCANZAR LA CONVERSION DE RUSIA, LA PAZ MUNDIAL Y LA LIBERTAD DE LA TIERRA SANTA, PIDE LO SIGUIENTE:
1º. SACRIFICIO

La Santísima Virgen en sus apariciones preguntó a los pastorcitos de Fátima: “¿Queréis ofreceros a Dios para llevar con sumisión todos los sufrimientos que a El le plazca enviaros, en reparación de los pecados con que …Más
LA CRUZADA DE REPARACION

EL INMACULADO CORAZON DE MARIA, PARA ALCANZAR LA CONVERSION DE RUSIA, LA PAZ MUNDIAL Y LA LIBERTAD DE LA TIERRA SANTA, PIDE LO SIGUIENTE:

1º. SACRIFICIO


La Santísima Virgen en sus apariciones preguntó a los pastorcitos de Fátima: “¿Queréis ofreceros a Dios para llevar con sumisión todos los sufrimientos que a El le plazca enviaros, en reparación de los pecados con que El es ofendido y para pedir la conversión de los pecadores? Diréis: Oh Jesús, por vuestro amor y en reparación por los pecados que se comenten contra el Inmaculado Corazón de María”.

2º. LOS PRIMEROS SABADOS

La Santísima Virgen dijo: “Vengo a pedir la Comunión reparadora en los Primeros Sábados de mes”.
“Yo os prometo asistir en la hora de la muerte, con las gracias necesarias para la salvación, a todos los que en el Primer Sábado de cinco meses seguidos se confesaren, recibieren la Sagrada Comunión, rezaren el Rosario y me hicieren compañía durante quince minutos, meditando en los misterios del Rosario, con el fin de desagraviarme”.

3º. EL ROSARIO

“Rezad el Rosario cada día para obtener la paz del mundo y el fin de la guerra, diciendo al final de cada misterio, Oh Jesús mío, perdonadnos y libradnos del fuego del infierno. Atraed a todas las almas al Cielo, especialmente aquellas que están en mayor necesidad”.

MODO DE REZAR
EL SANTO ROSARIO


Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos líbranos, Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.

Acto de Contrición

Señor mío Jesucristo, Dios y hombre verdadero. Creador y Redentor mío: por ser vos quien sois, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa en el alma de haberos ofendido; propongo firmemente nunca más pecar; apartarme de las ocasiones de ofenderos, confesarme y cumplir la penitencia que me fuera impuesta. Ofrezco, Señor, mi vida, obras y trabajos en satisfacción de mis pecados; y así como os lo suplico, así confío en vuestra bondad y misericordia infinita, me los perdonaréis por vuestra preciosísima sangre, y me daréis gracia para enmendarme y perseverar en vuestro santo servicio hasta el fin de mi vida. Amén.
Abrid, Señor, nuestros labios, para alabar y bendecir vuestro Santo Nombre y el de la purísima Virgen María; purificad nuestros corazones; iluminad nuestro entendimiento; inflamad nuestra voluntad, para que digna, atenta y devotamente recemos el Santo Rosario, y merezcamos ser oídos ante el acatamiento de vuestra divina majestad, por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.

MISTERIOS DEL SANTO ROSARIO

Gozosos,
que se rezaban lunes y jueves, ahora se rezan lunes y sábado:

De la Encarnación del Hijo de Dios.
De la Visitación de Nuestra Señora.
Del Nacimiento del Hijo de Dios.
De la Purificación de Nuestra Señora.
Del Niño Perdido y hallado en el templo.

Dolorosos, que se rezaban y rezan martes y viernes:

De la Oración en el Huerto.
De los azotes que el Hijo de Dios padeció atado a la columna.
De la Corona de Espinas del Hijo de Dios.
De la Cruz a cuestas.
De la Crucifixión del Hijo de Dios.

Luminosos, que se rezan los jueves:

El Bautizo de Jesús en el Jordán.
La Auto revelación de Jesús en las Bodas de Caná.
El Anuncio del Reino de Dios invitando a la Conversión.
La Transfiguración del Señor.
La Institución de la Eucaristía.

Gloriosos, que se rezaban miércoles, sábado y domingo, ahora se rezan miércoles y domingo:

De la Resurrección del Hijo de Dios.
De la Ascensión del Hijo de Dios.
De la Venida del Espíritu Santo.
De la Asunción de Nuestra Señora.
De la Coronación de Nuestra Señora.

En cada misterio, después de rezar un Padre Nuestro y diez Ave Marías, se dice: Gloria al Padre, Gloria al Hijo, y Gloria al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Después de los cinco misterios, se rezan las tres Ave Marías así:

Dios te salve, María Santísima, Hija de Dios Padre, Virgen purísima antes del parto; en tus manos encomendamos nuestra fe para que la ilumines. Dios te salve María

Dios te salve, María Santísima, Madre de Dios Hijo, Virgen purísima en el parto, en tus manos encomendamos nuestra esperanza para que la alientes. Dios te salve María

Dios te salve, María Santísima, Esposa del Espíritu Santo, Virgen purísima después del parto, en tus manos encomendamos nuestra caridad para que la inflames. Dios te salve María

Dios te salve, María Santísima, templo y sagrario de la Santísima Trinidad. Virgen concebida sin pecado original. Amén.

Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra; Dios te salve; a ti llamamos los desterrados hijos de Eva; a ti suspiramos gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora, abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos y después de este destierro, muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre, ¡oh, clementísima! ¡oh, piadosa! ¡oh, dulce siempre Virgen María!
Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo. Amén.

LETANIAS DE LA SANTISIMA VIRGEN

Señor, ten piedad de nosotros. Señor, ten piedad de nosotros.
Cristo, ten piedad de nosotros. Cristo, ten piedad de nosotros.
Señor, ten piedad de nosotros. Señor, ten piedad de nosotros.
Jesucristo, óyenos. Jesucristo óyenos.
Jesucristo, escúchanos. Jesucristo escúchanos.

Dios Padre celestial, ten misericordia de nosotros.
Dios Hijo, Redentor del mundo, ten misericordia de nosotros.
Dios Espíritu Santo, ten misericordia de nosotros.
Santísima Trinidad, que sois un solo Dios, ten misericordia de nosotros.

Santa María, ruega por nosotros.
Santa Madre de Dios, ruega por nosotros.
Santa Virgen de las Vírgenes, ruega por nosotros.
Madre de Jesucristo, ruega por nosotros.
Madre de la Iglesia, ruega por nosotros.
Madre de la divina gracia, ruega por nosotros.
Madre purísima, ruega por nosotros.
Madre castísima, ruega por nosotros.
Madre siempre virgen, ruega por nosotros.
Madre inmaculada, ruega por nosotros.
Madre amable, ruega por nosotros.
Madre admirable, ruega por nosotros.
Madre del buen consejo, ruega por nosotros.
Madre del Creador, ruega por nosotros.
Madre del Salvador, ruega por nosotros.
Madre de misericordia, ruega por nosotros.
Virgen prudentísima, ruega por nosotros.
Virgen digna de veneración, ruega por nosotros.
Virgen digna de alabanza, ruega por nosotros.
Virgen poderosa, ruega por nosotros.
Virgen clemente, ruega por nosotros.
Virgen fiel, ruega por nosotros.
Espejo de justicia, ruega por nosotros.
Trono de sabiduría, ruega por nosotros.
Causa de nuestra alegría, ruega por nosotros.
Vaso espiritual, ruega por nosotros.
Vaso digno de honor, ruega por nosotros.
Vaso insigne de devoción, ruega por nosotros.
Rosa mística, ruega por nosotros.
Torre de David, ruega por nosotros.
Torre de marfil, ruega por nosotros.
Casa de oro, ruega por nosotros.
Arca de la alianza, ruega por nosotros.
Puerta del cielo, ruega por nosotros.
Estrella de la mañana, ruega por nosotros.
Salud de los enfermos, ruega por nosotros.
Refugio de pecadores, ruega por nosotros.
Consoladora de los afligidos, ruega por nosotros.
Auxilio de los cristianos, ruega por nosotros.
Reina de los Ángeles, ruega por nosotros.
Reina de los Patriarcas, ruega por nosotros.
Reina de los Profetas, ruega por nosotros.
Reina de los Apóstoles, ruega por nosotros.
Reina de los Mártires, ruega por nosotros.
Reina de los Confesores, ruega por nosotros.
Reina de las Vírgenes, ruega por nosotros.
Reina de todos los Santos, ruega por nosotros.
Reina concebida sin pecado original, ruega por nosotros.
Reina elevada al cielo, ruega por nosotros.
Reina del Santísimo Rosario, ruega por nosotros.
Reina de la familia, ruega por nosotros.
Reina de la paz, ruega por nosotros.
Reina del mundo, ruega por nosotros.

Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, perdónanos Señor.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, escúchanos Señor.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros.

Bajo tu amparo nos acogemos, Santa Madre de Dios, no desprecies nuestras súplicas que te hacemos en nuestras necesidades, antes bien líbranos de todo peligro. ¡Virgen gloriosa y bendita!
Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios para que seamos dignos de alcanzar las divinas gracias y promesas de nuestro Señor Jesucristo. Amén.

Oración. Te suplicamos Señor que derrames Tu gracia en nuestras almas para que los que por el anuncio del Ángel hemos conocido la encarnación de Tu Hijo Jesucristo, por su pasión y Cruz seamos llevados a la gloria de Su resurrección. Por el mismo Jesucristo nuestro Señor. Amén.

Oración enseñada por el Ángel a los videntes de Fátima: ¡Dios mío, yo creo, adoro, espero y os amo! Os pido perdón para los que no creen, no adoran, no esperan y no os aman.

OFRECIMIENTO DEL SANTO ROSARIO

Por estos misterios santos que hemos hecho recuerdo,
Te pedimos ¡oh María! de la fe santa el aumento;
la exaltación de la iglesia; del Papa el mejor acierto;
de la nación americana y mexicana, la unión y feliz gobierno.
Que el no cristiano conozca a Dios,
y el que se ha alejado reconozca sus errores.
Que los cristianos perseguidos puedan practicar su fe.
Goce de puerto el navegante y de salud los enfermos.
Que en el Purgatorio logren las ánimas refrigerio.
Y que este santo sacrificio tenga efecto tan completo en toda la
cristiandad,
que alcancemos por su medio, el ir alabar a Dios en Tu compañía
en el cielo
.
Amén.

CONCLUSION

Reina del Santísimo Rosario, ruega por nosotros.
¡Viva la gracia, muera el pecado!
¡Ave María purísima
, en gracia de Dios concebida!

El Papa Leon XIII recomendó que se dijera siempre la siguiente oración al concluir todo Rosario.

Oración a San Miguel Arcángel

"San Miguel Arcángel, defiéndenos en batalla,

sé nuestro amparo contra las maldades y asechanzas del diablo,

que Dios le reprenda

es nuestra humilde súplica;

y tú, Príncipe de las huestes celestiales,

por el poder de Dios,

arroja al infierno a Satanás

y a los demás espíritus malignos,

que rondan por el mundo

buscando la ruina de las almas. Amén."
malemp
VALE LA PENA VERLO DATOS DEL NUEVO ORDEN MUNDIAL ✍️ 2018