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Obispo suizo: el Sínodo de Francisco es una campaña de marketing para promover herejías

La Iglesia no ha estado en el camino equivocado durante 2000 años, sólo para aprender mejor gracias a un proceso sinodal en curso, escribe el obispo auxiliar suizo emérito Marian Eleganti en una declaración del 1 de noviembre.

El Sínodo de Francisco trata de las mismas cosas viejas que se han reavivado por enésima vez desde la década de 1970: “democracia”, sacerdocio femenino, abolición de la moral sexual, adulterio y homosexualidad, alejamiento del “sacerdocio centralizado” en la liturgia. , etc.

Analiza y dice que el Sínodo es “una especie de campaña de marketing” para las herejías etiquetadas con frases vacías como Escucha, Inclusividad, Acogida, Diversidad, Igualdad.

El “Dios” sinodal se vende como “amor inclusivo” que aprueba todo. En contraste, Cristo predicó la exclusividad cuando las personas son excluidas del salón de bodas y expulsadas, donde hay llanto y rechinar de dientes.

Eleganti explica que el “Dios sinodal” ya no es la verdad y la justicia, las cuales son exclusivas y excluyen el error y el pecado y a los que insisten en pecar.

Para Eleganti, la Roca de Pedro se ha convertido en una duna móvil que avanza (syn-odos) en lugar de proporcionar claridad. Dice que la [supuesta] claridad de los Papas predecesores y los concilios anteriores, incluidos los textos del Vaticano II, ya no se aceptan hoy.

La Iglesia no es una caminante de sueños, sino una maestra que no se contradice, por ejemplo, en la valoración de la homosexualidad, que Eleganti llama el “gran mal del clero de los últimos 50 años”. Este problema no se aborda, sino que se encubre, incluso “desde la cúspide” en el Vaticano.

Eleganti deja claro que el mundo y su inmoralidad “no son una fuente de revelación”.

Imagen: Marian Eleganti, 2014 © wikicomons CC BY-SA, #newsTlgnzmrcru