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Obispo alemán: “No somos revolucionarios, queremos superar la crisis”

La única opinión compartida en el Camino Sinodal/Suicida es que “hay una crisis”, dijo el 2 de febrero el arzobispo de Bamberg, monseñor Ludwig Schick, de 71 años, al sitio web Avvenire.it, el diario anticatólico de la Conferencia Episcopal Italiana.

Schick identifica dos partidos en el Sínodo: los que quieren superar la crisis con una renovación de la Iglesia y los que quieren cambiar la Iglesia utilizando esquemas que, según las explicaciones de Schick, copian el modelo anglicano.

Él comenta: “Justamente ahora no sé cómo podemos salir de esta situación”. Él teme que habrá “más divisiones y más frustración”.

Las decisiones que no pueden ser implementadas solo por los obispos serán presentadas a Francisco, explica Schick anticipando que puede haber pedidos que solo pueden ser decididos por un Concilio Ecuménico. Pero él no puede imaginar un Concilio en el participarían “solamente obispos”.

Schick insiste en que los miembros del Sínodo no son revolucionarios, sino que buscan un camino para la Iglesia del futuro, sin plantear un cisma. Pero agrega:

“A veces, para ser honestos, temo un cisma, pero después la esperanza retorna”.

Imagen: Ludwig Schick, © Drujo, wikicommons, CC BY-SA, #newsFkrzzuhzox

nereid2
la verdad prevalece
Estos apóstatas alemanes son una secta cismática que está en plena comunión con el heresiarca Bergoglio.