El cardenal Sarah fue efectivamente vaciado

El cardenal Robert Sarah es teóricamente todavía el prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, “pero efectivamente marginado por su adjunto”, informa la agencia de noticias Associated Press, agregando que “en efecto, fue el adjunto [ultraliberal] de Sarah, el arzobispo Arthur Roche, quien firmó la nota explicativa a la nueva ley de Francisco, la cual permite a las conferencias episcopales, más que al dicasterio de Sarah, tener el sí final sobre las traducciones de la Misa”.

Associated Press habló sobre Sarah en el contexto de la conferencia del jueves en la Pontificia Universidad de Santo Tomás de Aquino, en Roma, al celebrarse el 10º aniversario del Motu Proprio Summorum Pontificum. La agencia presenta a los tres cardenales – Burke, Müller y Sarah –quienes participaron en el evento, como críticos del papa Francisco. Según otras voces, el papa Francisco es quien se opone a ellos.

Imagen: Robert Sarah, © Paval Hadzinski, CC BY-NC-ND, #newsObdjsyuaog

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14 oct 2017

Sofia M

16 sept 2017

Sarah el SEÑOR le proteja. Virgen María, cúbrelo con tu manto virginal.

Quo Primum tempore: La Constitución apostólica en forma de un bula papal emitida por San Pío V. Que estipula su uso obligatorio para todo el Rito latino de la Iglesia romana, excepto cuando preexistiera una costumbre diferente de un rito particular de, al menos, doscientos años de antigüedad celebrado ininterrumpidamente …Más

Sarah el SEÑOR le proteja. Virgen María, cúbrelo con tu manto virginal.

(EXCEPCION CUANDO PREEXISTIERA UN RITO PARTICULAR DE AL MENOS, 200 AÑOS DE ANTIGÜEDAD)

Para los que emiten los cambios litúrgicos o sus simpatizantes:

La codificación que aprobara San Pío V por medio de esta Bula, no podría ser jamás abrogada, como demostró años después un estudio que encargó el Papa Juan Pablo II sobre la forma tradicional del rito romano. En 1986 los cardenales Ratzinger, Mayer, Oddi, Stickler, Casaroli, Gantin, Palazzini, Tomko e Innocenti conformaron una comisión que dictaminó que la Misa Tradicional aprobada por San Pío V jamás había sido derogada y que tampoco podría serlo jamás.