Ya nada nos asusta ni nos espanta, de todo lo que sale de la mente de este desequilibrado reformador anticatólico, llamado Jorge Mario Bergoglio, alias Francisco, sabemos de sobra, que todas estas leyes carecen de validez , y son nulas, en virtud de que este individuo carece de potestad para legislar por el solo hecho de ser un Papa canónicamente inválido, pues fue impuesto por cardenales masones, con el único objeto, de buscar por todos lo medios la destrucción y desaparición de la Iglesia Católica, prevalecen las leyes en esta materia, definidas por innumerables santos y Sumos Pontífices, que a lo largo de la historia de la Iglesia han defendido esta ley suprema de la Iglesia, verdad que los católicos aceptamos y defenderemos por siempre, y que jamás aceptaremos que un discípulo fiel de Lutero, pueda en lo mas mínimo provocar en nosotros una disminución en nuestra fe católica. P. y Cango. Guillermo A. Núñez y García.