El Objetivo de las Bendiciones es que la Sodomía deje de ser Pecado
La pregunta de muchos es porqué se publica este documento contrario a la Tradición bi milenaria de la Iglesia. ¿Cuál es el objetivo?
Si una pareja en pecado, adulterio o sodomía, es bendecida, lo que se está negando e invisibilizando es el pecado. En apariencia, ya no es más pecado el adulterio, ya no es más pecado la sodomía si los están bendiciendo en la Iglesia. Esa es la última intensión de todo esto, porque nadie se convertirá si se lo afirma en el error. ¿Alguien cree que las parejas que ha bendecido públicamente el Presbítero James Martin se arrepentirán de su pecado, o más bien lo contrario continuarán juntos o con otros sodomitas luego de la bendición?
El argumento que utilizan para confundir es que el pecado es limitado pero la Misericordia de Dios es infinita.
Como siempre el Maligno utiliza parte de verdad para colar sus mentiras. Es cierto que la Misericordia de Dios es infinita, pero el hecho de ser infinita se entiende que puede perdonarlo todo, eso sí, siempre respetando la libertad humana. Cuando una persona se arrepiente de sus pecados está aceptando la Misericordia de Dios que es infinita y borra sus pecados. El problema es cuando se rechaza la Misericordia de Dios, Dios no puede hacer nada contra nuestra libertad.
El que persiste en actos contra natura, o persiste en el adulterio esta RECHAZANDO la Misericordia de Dios que es infinita. Por eso el Señor nos dejó el Sacramento de la Reconciliación. El ha venido a perdonar nuestros pecados, si nos reconocemos pecadores y nos arrepentimos de los mismos. Con los Fariseos, que en lugar de arrepentirse y pedir perdón por sus pecados lo rechazaban no pudo hacer nada, la omnipotencia de Dios tiene como limite nuestra libertad. Así Dios hizo las cosas desde el principio.
No podemos redefinir el bien y el mal. Lo que es pecado y lo que no lo es, diciendo: como la Misericordia de Dios es infinita, ya nada es pecado y no necesitamos corregirnos, ni arrepentirnos de nada.
Bendecir la sodomía o el adulterio es en la práctica hacer que los fieles no las consideren más pecados, aunque sean una grave ofensa a Dios. No es pedir misericordia, es rechazar la misericordia y querer cambiar a Dios. Lo que es gravísimo porque querer cambiar a Dios es el pecado de Soberbia al que nos induce Lucifer y nos alejó de Dios, dañando nuestra naturaleza. Nuestra naturaleza está caída desde Adán y Eva por la soberbia de intentar redefinir el bien y el mal prescindiendo de Dios. Como si la creación la hubiéramos hecho nosotros, imponiéndole a Dios lo que es el bien y el mal.
¿No se está haciendo esto con estas bendiciones? La falsa misericordia es terrible, el salmo lo dice clarito un corazón arrepentido y humillado tu no lo desprecias. ¿En que se arrepiente alguien que quiere que le bendigan la unión pecaminosa? No se arrepiente de nada. Si es un adultero o adultera, ¿se está arrepintiendo del daño que le hace a su verdadero esposo o esposa y a su familia verdadera? ¿se está arrepintiendo del daño que le hace a su actual concubino/a cuando pide la bendición en pareja con su complice? Es fácil darse cuenta que no, que lo que quieren es blanquear una situación que Dios no acepta.
La ventana de Overton: teoría política que describe cómo se puede cambiar la percepción de la opinión pública para qué las ideas que antes se consideraban descabelladas sean aceptadas a largo plazo. Según esta teoría, ni siquiera los temas tabúes quedarían libres de sus efectos. Para esto no es necesario ningún lavado de cerebro ni la implantación de un régimen dictatorial, sino el desarrollo …Más
La ventana de Overton: teoría política que describe cómo se puede cambiar la percepción de la opinión pública para qué las ideas que antes se consideraban descabelladas sean aceptadas a largo plazo. Según esta teoría, ni siquiera los temas tabúes quedarían libres de sus efectos. Para esto no es necesario ningún lavado de cerebro ni la implantación de un régimen dictatorial, sino el desarrollo de una serie de técnicas avanzadas cuya implementación pasaría desapercibida por la sociedad.
Etapa 1: de lo impensable a lo radical
Estas ideas se considera repugnante y ajena a toda moral. En este punto, la ventana está cerrada y no se mueve. Para comenzar con el cambio de opinión, se traslada la idea al ámbito teológico y científico, ya que para los científicos no deben existir temas tabúes. Así, la comunidad intelectual analizaría las tradiciones y rituales de algunos casos, a la vez que se crea un grupo radical defensor que son promocionados por los medios de comunicación.
Etapa 2: de lo radical a lo aceptable
Tras la etapa 1, la idea ha pasado de ser impensable a discutirse. En la segunda etapa, se persigue la aceptación de la idea. Con las conclusiones de los expertos, podrá calificarse de intransigentes a quienes se nieguen a adquirir conocimientos sobre el tema tratado.
Las personas que se resistan comenzarán a ser vistos como fanáticos que se oponen a los expertos. Los intolerantes son condenados públicamente a medida que la idea va perdiendo sus connotaciones negativas, llegando incluso a cambiar el nombre de sodomía por persona con atracción al mismo sexo. Poco a poco, los medios de comunicación harían que el hecho de que el pecado sea bendecido pueda considerarse como algo aceptable y respetable.
Etapa 3: de lo aceptable a lo sensato
Consiguiendo que la bendición del pecado se convirtiese en un derecho común, podría pasarse de una idea en principio inaceptable a algo sensato. Mientras tanto, quienes sigan oponiéndose a la idea seguirán siendo criticados. Estas personas pasarían a ser consideradas radicales que están en contra de un derecho fundamental. Por otro lado, la comunidad de expertos y los medios de comunicación insistirían en que la historia humana está repleta de casos contra el sexto mandamiento, sin que esto fuese extraño para esas antiguas sociedades.
Etapa 4: de lo sensato a lo popular
En estos momentos, el pecado contra el sexto mandamiento se convierte en un tema predilecto. La idea comienza a mostrarse en las películas católicas, en series de televisión católica y en cualquier otro método de entretenimiento católico como algo positivo. A su vez, se ensalza a personajes históricos que hayan estado relacionados con estas prácticas. El fenómeno es cada vez más multitudinario, y continúa reforzando su imagen positiva.
Etapa 5: de lo popular a lo político
Finalmente, la ventana de Overton, cerrada al principio, se ha abierto de par en par. En esta última etapa comienza a prepararse la maquinaria legislativa que legalizará el fenómeno. Los partidarios de la unión homosexual, adulterio, fornicación, poligamia, pedofilia se consolidan en la nueva doctrina y comienzan a buscar más poder y representación.
Así, una idea que en principio era impensable e inmoral en todos sus aspectos, ha llegado a establecerse en la conciencia colectiva como un derecho mediante una teoría que puede cambiar la percepción pública sobre cualquier idea, por disparatada que pueda ser.
