Medios de comunicación pro-muerte atacaron recientemente a George Delgado, un médico de familia y católico devoto, quien vive en San Diego, California (Estados Unidos). El motivo: Delgado se presenta a las mujeres embarazadas que han comenzado un aborto a través del uso de la pastilla del día siguiente y cambia sus pensamientos unas pocas horas o unos pocos días después, ofreciéndoles una oportunidad para revertir el procedimiento.
La estrategia de Delgado consiste en aplicar a esas mujeres una inyección de progesterona extra, la cual puede anular los efectos de la pastilla del día después.