LA ORACIÓN DEL SALUDO

LA ORACIÓN DEL SALUDO

Aparición del 20 de junio 1646

La “Oración del Saludo” es una de las oraciones que Nuestra Santísima Madre celestial nos ha donado durante las diferentes y numerosas apariciones ocurridas en la historia, para que pudieramos acercarnos cada vez más a la Fe recibiendo todas la Gracias de que cotidianamente tenemos necesidad.

Esta oración fue dictada por Nuestra Señora el 20 de junio 1646, cuando se apareció a una pastorcita alemana llamada Eulalia, que se encontraba en un prado con su rebaño en Baviera, Alemania.

Eulalia solía conducir su rebaño a un prado donde estaba una imagen de la Virgen, y que ella veneraba con fuerte devoción hasta el punto que prometió rezar, delante de la imagen Mariana, cada día nueve Rosarios. Pero, durante aquel mes de junio en Baviera llegó un calor de tipo excepcional modificando un poco las costumbres, por lo que se volvió más dificultoso mantener la promesa hecha a la Santísima Virgen. El ganado no le dejó el tiempo para rezar, porque tenía que buscar espacios más extensos para encontrar hierbas de pastar.

Fue en ese período que la Madre de Dios se le apareció y le enseñó la “Oración del Saludo”, explicándole que, si rezada con devoción y por tres veces, después haber rezado al menos cinco décadas del Santo Rosario, habría tenido el mismo valor de nueve Rosarios. Le ordenó al mismo tiempo que la enseñara a los demás para que pudiesen obtener los mismos beneficios. Pero, la pastorcita, después de la aparición se dejó vencer por la tentación de no difundir la oración que la Virgen le había donado.

Por este motivo después de su muerte su alma no logró tener la paz que deseaba. Pero, Dios, por intercesión de la Virgen María, le dio la gracia de manifestarse a una persona mientras estaba rezando intensamente. Así la pastorcita pudo decirle que no habría encontrado reposo si no hubiera desvelado a los hombres la oración que le fue dictada por la Madre de Dios. Su alma vagante sólo entonces encontró la quietud deseada y así, cuando por fin la oración pudo difundirse, la pastorcita, quien fue un poco egoísta, logró el consuelo y la serenidad eterna en el Cielo.

He aquí la oración:

LA ORACIÓN DEL SALUDO

(repetir 3 veces después de rezar el Santo Rosario)

¡Dios te saluda, María!

¡Dios te saluda, María!

¡Dios te saluda, María!

Oh María, yo te saludo 33.000 veces como te saludó el Arcángel San Gabriel.

Es alegría de Tu Corazón y también de mi corazón,
que el Arcángel te llevó el Saludo de Cristo.

Ave María …


---------------------

[Nota: Esta oración, rezada 3 veces después al menos una parte del Rosario (es decir 5 décadas), corresponde a 9 Rosarios. Con esto no se quiere para nada disminuir y/o sustituir el rezo del Santo Rosario, es más, quien puede o desea, puede rezar todos los Rosarios que quiere y al final rezar la susodicha oración 3 veces.]

---------------------

www.devozioni.altervista.org/preghiera_di_saluto.htm