Supuestamente quien se lanza por un camino de escándalo semejante es por que está acabado o ha bajado su índice de audiencia. Es el recurso aquel del teatro, de loa artistas, que decía, que hablen de mí aunque sea mal, pero que hablen de mi.

Yavhe, único Dios, aplica tu justicia ante tamaño escándalo. Perdonemos a esta criatura de Dios y que caiga sobre él todo el poder de Nuestro Creador.

Hago esta petición para no caer en la asechanza de la provocación de las blasfemas y sacrílegas palabras de este ser perdido que no sabe lo que se hace. Jesús nos enseñó que no hay que cortarle la oreja al esclavo de los que le querían matar.

Delito tienen los espectadores que no se levantan y se van de la sala, mostrando su rechazo ante este mensage de odio y terrorismo.