Cerrada la comunidad Loyola del padre Rupnik

Las hermanas de la Comunidad de Loyola recibieron el 14 de diciembre un decreto del Dicasterio para la Vida Religiosa en el que se les informa de la disolución de su comunidad. El motivo son graves problemas en el ejercicio de la autoridad y en la convivencia.

La comunidad se fundó en Liubliana (Eslovenia). La disolución debe producirse en el plazo de un año.

Rupnik cofundó la comunidad de Loyola en Liubliana (Eslovenia) con la hermana Ivanka Hosta hace más de tres décadas.

Según una presunta víctima italiana, a principios de los años 90 había 41 hermanas y el padre Rupnik llegó a fornicar con casi 20 de ellas.

Rupnik fue capellán de la comunidad hasta septiembre de 1993, cuando él y varias hermanas abandonaron la comunidad de Liubliana. Se fueron a Roma, donde Rupnik abrió su escuela de arte y teología, el Centro Aletti.

Hosta fue superiora general de 1994 a 2023. En junio fue apartada de la dirección de la comunidad y se le ordenó no tener contacto con miembros actuales o antiguos de su comunidad durante tres años.

Como "penitencia externa" se le ordenó peregrinar mensualmente a un santuario mariano durante un año para rezar "por las víctimas del comportamiento del padre Marko Ivan Rupnik y por todas las religiosas de la comunidad de Loyola" a las que se acusa de haber perjudicado.

Traducción IA