Documento final del Sínodo Amazónico llama al Ministerio oficial de Mujeres en la misa

John Henry Westen
LifeSitenews

Sínodo De Amazonas , Diaconado Femenino , Francisco , Ordenación De Mujeres

ROMA, 26 de octubre de 2019 ( LifeSiteNews www.lifesitenews.com/news/breaking-amazon… ) - El documento final del Sínodo del Amazonas pide que se permitan los ministerios de mujeres en la misa, específicamente diciendo que las mujeres pueden "recibir los ministerios del Lector y Acólito, entre otros para ser desarrollados". no llama específicamente a un "diaconado" permanente para las mujeres, se refiere a la Comisión creada por el Papa Francisco para estudiar la cuestión y dice que los Padres sinodales compartirán sus observaciones con la Comisión y esperarán el informe de la Comisión (párrafo 103).

"Es urgente para la Iglesia Amazónica promover y conferir ministerios para hombres y mujeres de manera equitativa", dice el documento (párr. 95). Citando la exhortación del Papa Francisco Evangeli Gaudium , el documento del sínodo (párrafo 99) llama a la Iglesia a "crear oportunidades aún más amplias para una presencia femenina más incisiva en la Iglesia". Cita nuevamente del Papa Francisco (de un discurso de 2013), dice , "No reduzcamos el compromiso de las mujeres en la Iglesia, sino que promuevamos su participación activa en la comunidad eclesial".

"El Magisterio de la Iglesia desde el Concilio Vaticano II ha destacado el lugar principal que ocupan las mujeres dentro de él", dice el documento (párr. 100). Y citando al Papa Pablo VI, agrega: “Ha llegado el momento, ha llegado el momento de que la vocación de la mujer se cumpla plenamente, el momento en que la mujer adquiere en el mundo una influencia, un peso, un poder nunca alcanzado hasta ahora. "

El documento le pide al Papa que cree un ministerio específico para mujeres en la Amazonía llamado "mujer líder de la comunidad".

El documento del sínodo abre heridas dolorosas en la Iglesia Católica, donde un enfoque modernista ha prevalecido en su mayor parte entre las parroquias no latinas (de forma no extraordinaria). El documento básicamente exige un papel oficial para las mujeres para el servicio en el altar que las mujeres ya realizan en la mayoría de las iglesias en Occidente.

Las iglesias católicas más tradicionales, incluso dentro de las parroquias no latinas (Rito Ordinario), han conservado la práctica de no permitir el "servicio" de las mujeres en el altar como lectoras, servidores del altar o ministros (extraordinarios) de la Sagrada Comunión.

Si bien la asignación para el servicio de la mujer es generalizada, los argumentos en contra de tal práctica son notablemente autoritarios tanto en las Escrituras como en los escritos de los Papas a lo largo de los siglos.

San Pablo en 1 Cor. 14:34 escribe: "Las mujeres deben permanecer en silencio en las iglesias", una ley que se siguió en la Iglesia hasta que varias interpretaciones del Concilio Vaticano II vieron a las mujeres leer las Escrituras en la misa, pero no el Evangelio.

La encíclica Allatae Sunt de 1755 del Papa Benedicto XIV resume la historia y la enseñanza de la Iglesia, diciendo:

“El Papa Gelasio en su novena carta (cap. 26) a los obispos de Lucania condenó la práctica malvada que se había introducido de las mujeres que servían al sacerdote en la celebración de la misa. Dado que este abuso se había extendido a los griegos, Inocencio IV lo prohibió estrictamente. en su carta al obispo de Tusculum: «Las mujeres no deberían atreverse a servir en el altar; se les debería negar por completo este ministerio '. Nosotros también hemos prohibido esta práctica en las mismas palabras en nuestra constitución repetida Etsi Pastoralis, secta. 6, no. 21. ”(Papa Benedicto XIV, Encíclica Allatae Sunt , 26 de julio de 1755, n. 29)

En cuanto a una sugerencia para las mujeres "diáconos", el Papa Juan Pablo II hizo hincapié en la imposibilidad de la "ordenación" femenina en el documento de 1994 Ordinatio Sacerdotalis :

Aunque la enseñanza de que la ordenación sacerdotal debe reservarse solo a los hombres ha sido preservada por la Tradición constante y universal de la Iglesia y enseñada firmemente por el Magisterio en sus documentos más recientes, en la actualidad en algunos lugares todavía se considera abierta. para debatir, o el juicio de la Iglesia de que las mujeres no deben ser admitidas a la ordenación se considera que tiene una fuerza meramente disciplinaria.
Por lo tanto, para que toda duda pueda ser eliminada con respecto a un asunto de gran importancia, un asunto que pertenece a la constitución divina de la Iglesia misma, en virtud de mi ministerio de confirmar a los hermanos (cf. Lc 22, 32) declaro que la Iglesia no tiene autoridad alguna para conferir la ordenación sacerdotal a las mujeres y que este juicio sea definitivamente sostenido por todos los fieles de la Iglesia.

El Papa Juan Pablo II también señaló a Nuestra Señora como la prueba definitiva de que las mujeres no debían estar en el ministerio ordenado porque, como él sugirió, si Cristo hubiera elegido a cualquier mujer en la historia para la ordenación, habría sido Su Madre. Él dijo:

El hecho de que la Santísima Virgen María, Madre de Dios y Madre de la Iglesia, no recibió ni la misión propia de los Apóstoles ni el sacerdocio ministerial muestra claramente que la no admisión de mujeres a la ordenación sacerdotal no puede significar que las mujeres sean de menor dignidad, ni puede interpretarse como discriminación contra ellos. Más bien, debe ser visto como la observancia fiel de un plan para ser atribuido a la sabiduría del Señor del universo.