MENSAJE DE LA MADRE A ROSARIO ARENILLAS
CRUZ BLANCA, 28 de Abril de 1984.

Rosario:– Madre ayúdame, soy muy pecadora, Madre mía.
Madre:– Hijitos míos... hijitos míos... hijitos míos... es tan importante que todos unidos, puedan ustedes DARLE VIDA A LA ORACION... porque cada día está muriendo el AMOR ENTRE LOS HOMBRES.
Si desgraciadamente el ODIO vence al AMOR, no tendréis camino para llegar a Mí.
ORAD INTENSAMENTE para que la LUZ de la ORACIÓN, pueda ser transmitida al mundo entero, hijitos míos.
Rosario:– No tengo nada que ofrecerTe, Madre mía, perdóname.
Madre:– Estoy tan cerca de vosotros, hijos míos... que no podrán ustedes comprender Mi llegada.
Para algunos de vosotros, será tan imposible el poder comprender que en estos momentos ESTOY JUNTO A VOSOTROS, hijos míos... pero es tanto lo que deseo estar con vosotros y quiero compartir vuestro dolor, porque son tan gigantescos LOS PRECIPICIOS por donde vais a ser "lanzados" por el enemigo, hijos míos... ¡estar alerta, hijos míos!, porque EL ENEMIGO QUIERE APARTAROS DE MÍ... y YO QUIERO LLEVAROS A LA PRESENCIA DEL PADRE, hijitos míos.
Por eso quiero deciros que con vuestras ORACIONES, pueden ser iluminados vuestros caminos
(Mensaje privado para un devoto, M.): Aunque no puedas comprender Mi llegada, hijo mío, has de saber que Yo vengo para presentar a los hombres al Padre... Voy a bendecirte, si es que lo deseas, pero detén tu mente humana, hijo mío y no me busques en la profundidad porque no estoy en la profundidad, estoy hijo mío, muy cerca de ti, aunque el miedo que tienes te haga alejarte de Mi, hijo mío.
Yo vengo para algo muy distinto de lo que tú llevas grabado en tu mente humana.
Si tuvieras... quiero que me dieras tus cuentas de rosario, hijo mío...
Para qué estudiáis Mi llegada si quedareis perdidos, hijos míos, si vengo a ofreceros algo que aún, ningún sabio de la tierra, ha podido comprender.
SOY ALGO, que por las ofensas que el hombre Me hace diariamente, SIENTEN MIEDO MUCHOS HOMBRES.
Rosario:– Madre, Madre... qué pena verTe llorar Madre mía... y yo, no poder llorar junto a Ti
Mi cuerpo está hecho de barro y no tiene lágrimas para llorar junto a Ti.
Madre:– LOS HOMBRES LLORAIS CUANDO NO ES NECESARIO, cuando el hombre tiene que llorar, SONRIE ANTE SU DESGRACIA pero ahora que el hombre tendrá angustiosamente que llorar, HE VENIDO A LA TIERRA PARA ESTAR JUNTO A VOSOTROS, PARA COMPARTIR VUESTRO DOLOR... POR ESO quiero BENDECIROS A TODOS LOS HOMBRES.
Quisiera hijos míos, que todos fueran ustedes signados por MI SIGNO, para poderlos salvar del signo del enemigo, porque sé que muy pronto todos seréis signados con el signo de la bestia, pero TODO AQUEL QUE LLEVE MI SIGNO... el signo de la bestia será rechazado, hijos míos.
(Privado para una jovencita): Qué alma más blanca tienes hija mía, cuántas riquezas... cuántas riquezas has sabido detener en tu corazón, hija mía... pero sigue, porque muchos hombres están desperdiciando su tiempo.
Espera, te voy a dar un premio muy importante, voy a detenerme en un paraíso de flores blancas, entre ellas hay coloradas, pero Mis Manos solamente tocarán una, blanca, para premiarte, hija mía. ¿porqué estás impaciente?
Hija mía, ni tú misma podrás comprender lo que Yo he llegado a depositar entre tus manos (Le entrega una flor blanca y añade):
Cuídala hija mía, haz que tome vida esa blancura, para que puedas aplacar tus sentimientos, porque sé que tú Me necesitas.
Aunque tú con tu vista rodeas y rodeas y no puedes tenerMe contigo, pero hijita mía, estoy muy cerca de ti, caminaré contigo, porque tu larga distancia, no será larga distancia para llegar a. Mí.
Tus pupilas también se mojan hijita mía, porque tus sentimientos son los Míos, hijita mía.
Cuanto tendréis que llorar, hija mía, llorareis por la muerte de tu pueblo, porque en tu pueblo, está un soldado mío hija mía y ese soldado mío, luchará y luchará hasta poder vencer al enemigo, hija mía.
Rosario:– Ay Madre...
(Privado para una anciana señora, V.):
Madre:– Acariciaré tus cabellos blancos, hija mía. Cuánto cariño, hija mía, cuánto amor a Mi Hijo!.. pero SIGUE LUCHANDO hija mía, SIGUE LUCHANDO hija mía, porque LA TIERRA SE ESTA CONTAMINANDO, SIGUE LUCHANDO Y ASI VENCEREMOS EL PECADO DE LA TIERRA, hija Mía.
Tu cuerpo es un sagrario viviente, hija mía, pero SIGUE para la salvación de tantos hijos tuyos, que son MIOS, hija mía, tantos hijos tuyos, que son míos y están amenazados por el ODIO DE LA BESTIA, hija Mía.
Te voy a dar algo muy importante para que en todo momento tengas comunicación conMigo. Te voy a dar unas pequeñas cuentas (de Rosario) para que en algunos momentos puedas sentirte muy cerca de Mí, hija Mía.
Rosario:– Que no sea el mío, Madre mía.
(La vidente al conocer el deseo de la Madre de dar un Rosario a la devota aludida, ruega a la Madre que no la dé, SU ROSARIO.)
Madre:– Mientras el hombre sonría, Mi Hijo está cantando con un cante cantarín, porque ese cante produce el desprecio de los hombres y el desprecio lo manifiesta, cantando, pero en ese cante, está invitando a todos los hombres.
(Privado para una devota)
Madre:– Amor ciego no mata... qué amor tan ciego sientes por Mí, hija mía... eso te hará llevarte a ser trasladada a la BARCA DEL PADRE, hija mía.
A todos quisiera bendeciros, porque todos Me deseáis, pero no lo comprendéis.
Venid a Mí.
(Privado a otra devota, aludiendo a un ser suyo, querido):– Cuanta fuerza de amor, hija mía, has tenido, cuánta fuerza, y tu fuerza de amor LE ha dado vida, porque ÉL Me necesita tanto... ÉL Me necesita tanto... pues se siente dormido ante la presencia de Mi Hijo.
Despiértalo del sueño, hija mía, para que no seáis sorprendidos, porque llegará el momento en que todos seréis sorprendidos.
Aunque YA Mi Hijo ha mandado a la tierra un EJERCITO DE ANGELES para que podáis ser salvados del enemigo, pero no por eso, hijos míos, dormiros... (De estas palabras a todos, vuelve la Madre a dirigirse privadamente a. la misma devota):– No dejes que duerma, no dejes que duerma hija mía.
Hazlo como un niño pequeño delante de Mí y como un sabio delante de los hombres, porque por muy intensa que sea su sabiduría, quedara perdido en Mi Camino.
Enséñalo a caminar hija mía, porque sobre ti derramé muchas gracias para que fueran compartidas entre cuantos te rodean, Hija mía.
Todo hombre que intente hacer la Voluntad de Mi HIJO, será presentado al Reino del Padre, por eso hijos míos, TODOS TENEIS QUE LUCHAR POR INTENTARLO.
¿Queréis hijos míos, que Yo os enseñe, cómo tenéis que intentar hacer la Voluntad de Mi Hijo?
AMAR LOS UNOS A LOS OTROS COMO YO OS HE AMADO... A TODO EL MUNDO, AMAR... AMAR... Y NO CAER EN LA DEBILIDAD DEL ODIO, hijo mío.
Cuando ante vosotros se presente un hombre lleno de ODIO, cubridlo con AMOR y no cubrirlo con ODIO, hijos míos.
(Siguen varios mensajes privados)
– Te voy a bendecir, hijo mío, no te desesperes, ¡no! porque todo llegará a su debido tiempo, solamente esmero el REGRESO del hombre, el regreso... tienes que regresar a Mí, pero esperándoMe... esperándoMe, porque YO ESTOY ALERTA para que en tu regreso pueda estrecharte entre Mis Brazos y que Mis Brazos sean tu cuna, para YO presentarte al Padre
– No sueltes lo que con tanto cariño te he dado porque no lo puedes comprender, porque el mundo te va a tratar con frialdad, hija mía.
– Si alguna vez tu alma se tiene que rendir, hijo mío, que sea rendida ante la Presencia del Padre, hijo mío.
Porque llegará el momento en que VENDRAN FALSOS PROFETAS, hijo mío, y con sus gritos, gritarán diciendo: ¡SOY EL MESIAS!, no se moverá ni un solo cabello de vuestra. cabeza, hasta que no sea la Voluntad de Mi Hijo... por eso, hijos míos, estad ALERTA, ESPERAD A MI HIJO... ESPERAD, HIJOS, COMO BUENOS SOLDADOS
C. (Pronuncia la vidente el nombre de la devota aludida) C.: Cada día eres más fiel para Mi Hijo, cada día, hija mía... pero, Yo te necesito tanto a ti y a todos cuantos te rodean.
No dejes que muera el timbre de tu voz, porque el timbre de tu voz será el ECO DE MI VOZ y será escuchado en tantos lugares de la tierra.
Porque no será el timbre de Mi Voz el que tú puedas escuchar, será AGUA VIVA hija mía, AGUA VIVA DEL MANANTIAL DEL CORAZON DE MI HIJO.
No te dejes vencer, ¡no!, LUCHA, hija mía, hasta poder introducirte en esa BARCA tan inmensa que está esperando a tantos hijos Míos, que de buena voluntad quieren introducirse en ella.
Sé que tú lo deseas, hija mía, pero no vengas sola, no hija mía, porque hay tantas ovejas "esperriadas" (descarriadas) en la tierra.
Este ECO DE MI VOZ tiene que ser escuchado en el mundo entero NO PUEDE MORIR ENTRE VOSOTROS... ¡no!... no puede morir, TIENE QUE VIVIR, porque es la VOLUNTAD DEL PADRE.
Compréndelo hijita mía.
– Te voy a. bendecir, hijo mío, te voy a bendecir hijo mío, qué buena cuna te ha mecido hijo mío, porque fue Mi Voluntad, pero NO CAIGAS EN EL CANSANCIO, de estar tendido en esa cuna que con tanto amor se está "cuneando" en todo momento.
UNIROS TODOS, hijos míos, UNIOS TODOS hijos míos, UNIROS TODOS a ESTE TRONCO... porque este TRONCO ES MI DIVINO HIJO, que hace producir tantos vástagos para el bien de vuestra alma.
Rosario:– (Tras unos momentos de silencio, exclama.):– No, Madre mía, no puedes irte, no estoy cansada... si Tú me ayudas no puedo cansarme... no quiero volver a la tierra, ¡no!, déjame conTigo, Madre mía, déjame conTigo.
Madre:– ... quiero seguir bendiciendo a todos.
(Tras varios breves mensajes muy particulares, por lo que no se publican, la Madre continúa dirigiéndose a. todos): ... Al final todos NOS encontraremos, por eso hijos míos, Yo les ruego a todos los hombres que NO DEJEN ustedes DESPERDICIARSE ESTAS SEMILLAS QUE CON TANTO CARIÑO LES ESTOY ENTREGANDO.
Llegará el momento en que (no) puedan ustedes reconocer el CAMINO PARA CONDUCIROS Y LLEGAR A MI HIJO.
Rosario:– ¿Adónde me tienes, Madre mía? ¿Porqué estoy tan sola, porqué Madre mía?
Madre:– Y ahora Mi Bendición es para todos: El NOMBRE DEL PADRE, en el NOMBRE DE MI DIVINO HIJO y DEL ESPIRITU SANTO, MI BENDICION ES PARA TODOS.
EsperadMe hijitos míos, porque tengo tanto que deciros a todos. Es tanto lo que tengo que deciros... porque TODOS TENEIS UNA MISION QUE CUMPLIR... aunque ésto os parezca imposible.
ORAD INTENSAMENTE HIJOS MIOS, PARA QUE EL AMOR PUEDA BROTAR COMO LA PRIMAVERA EN VUESTROS CORAZONES.
TODO LO HE BENDECIDO, hijos míos.
(Esta última indicación de la Madre "TODO LO HE BENDECIDO" es muy oportuna para aquellas personas que creen no quedar los objetos religiosos, estampas, libritos, medallas, rosarios etc., si no logran depositarios en las manos del o de la vidente, bendecidos... y naturalmente, todo queda bendecido cuando la Madre o el Señor dan una Bendición a todos y a todo).
Rosario:– Adiós Madre... adiós Madre... adiós Madre