Fragor ensordecedor

El fragor de la batalla es enorme, a poco que se detenga uno a escuchar sin prisa ni estres escucha unn rumor incesante e increchendo. En este planeta en que vivimos cada vez nos apiñamos más y más y …Más
El fragor de la batalla es enorme, a poco que se detenga uno a escuchar sin prisa ni estres escucha unn rumor incesante e increchendo. En este planeta en que vivimos cada vez nos apiñamos más y más y de ahí el fragor de la batalla, competir por el espacio, por la preponderancia social, por tener más que el vecino, hasta ciertas personas que se denominan católicas se ven arrastradas en este torrente de vorágine demencial, tambien están los que se llaman así mismos cristianos y no lo son, solamente son gente rabiosa con la vida, llenas de odio y resentimiento que desean destruir a toda costa a quien no piensa como ellos, añadamos el islam con sus imposiciones, total un tremendo caos a ver quien hace más grande desastre de la tradición, una huída hacia delante, hacia un precipicio cierto que no pueden ver a causa del fragor de su rabia, envidia, rencor, resentimiento y falta de paz. Al parecer todo vale con tal de tener momentos de gloria sin pensar para nada en el momento siguiente. En …Más
Salvador Maria
Los dos caminos "entrad por la entrada estrecha; porque ancha es la entrada y espacioso el camino que lleva a la perdición, y son muchos los que entran por ella; mas !qué estrecha y que angosto el camino que lleva a la Vida!; y pocos son los que lo encuentran (Mt 7, 13-14). Biblia de Jerusalén en letra grande. Desclée De Brouwer.