El rígido Francisco siembra aún más vientos

Con este texto, quiere poner definitivamente punto final a la Liturgia Romana.
Francisco ha elegido la forma de Constitución Apostólica para hacerse eco de la Constitución Missale Romanum (1969) de Pablo VI, con el fin de subrayar la igualdad de rango de ambas Constituciones.
Según Summorum-Pontificum.de (13 de enero), la Constitución contiene cuatro mandatos principales:
1. En ninguna iglesia podrá celebrarse exclusivamente el Rito Romano.
2. En ninguna iglesia puede celebrarse el Rito Romano todos los domingos.
3. Se prohíbe el uso del Rito Romano para los sacramentos y los sacramentales.
4. Todo sacerdote está obligado a presidir el fallido Novus Ordo de Pablo VI.
Imagen: © Joseph Shaw, CC BY-NC-SA, #newsFnqbrwcojr