Francisco a obispos alemanes: la Iglesia firme frente a “un proceso de transformación fundamental”
El 29 de junio el papa Francisco escribió una carta de 19 páginas a los obispos alemanes, la cual está llena de verborrea y perogrulladas (ver texto completo debajo). La carta declara que la Iglesia …Más
El 29 de junio el papa Francisco escribió una carta de 19 páginas a los obispos alemanes, la cual está llena de verborrea y perogrulladas (ver texto completo debajo).
La carta declara que la Iglesia está en un “cambio de era” y firme frente a un “proceso de transformación fundamental”. Anima a encontrar “una respuesta franca a la situación actual” [es decir, seguir recetas protestantes fracasadas].
Al mismo tiempo, a Francisco le preocupa la “fragmentación” de la Iglesia.
En su totalidad, el estilo insípido de la carta se presta a cualquier interpretación.
El conservador vicario general de Ratisbona, el padre Michael Fuchs, la leyó como una crítica del Camino Sinodal alemán, mientras que el cardenal modernista de Münich, Reinhard Marx, la ve como alentando ese Camino.
Imagen: © Mazur/catholicnews.org.uk, CC BY-NC-SA, #newsZlcebfrsle
La carta declara que la Iglesia está en un “cambio de era” y firme frente a un “proceso de transformación fundamental”. Anima a encontrar “una respuesta franca a la situación actual” [es decir, seguir recetas protestantes fracasadas].
Al mismo tiempo, a Francisco le preocupa la “fragmentación” de la Iglesia.
En su totalidad, el estilo insípido de la carta se presta a cualquier interpretación.
El conservador vicario general de Ratisbona, el padre Michael Fuchs, la leyó como una crítica del Camino Sinodal alemán, mientras que el cardenal modernista de Münich, Reinhard Marx, la ve como alentando ese Camino.
Imagen: © Mazur/catholicnews.org.uk, CC BY-NC-SA, #newsZlcebfrsle
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Una carta maravillosa de Francisco. Dulce pero firme. El remedio para el decaimiento de la fe no es cambiar las estructuras para procurar soluciones rápidas o caer bien a los medios, sino ser fieles a nuestra identidad y confiar en la fuerza del Espíritu Santo, que hace nuevo todo lo viejo. ¡Gracias, Santo Padre! Con ternura, respeto y dulzura pero poniendo los puntos sobre las íes a todo el mundo.