Francisco ha nombrado al controvertido jesuita Antonio Spadaro subsecretario del inútil Dicasterio para la Cultura y la Educación, a partir de enero.
Spadaro fue anteriormente editor de la revista jesuita basura La Civiltà Cattolica, donde lo reemplazará el padre Nuno da Silva Gonçalves.
El homosexualista Spadaro es amigo de Francisco desde hace años. Sólo en agosto insultó a Cristo como un pecador, “rígido”, “despiadado” y necesitado de conversión.
El nombramiento debe ser un premio por su blasfemia.
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