En su homilía del domingo después del Corpus Christi, Francisco moralizó que “no podemos partir el pan el domingo si nuestro corazón está cerrado a nuestros hermanos y hermanas. No podemos participar de ese Pan si no damos pan a los hambrientos. No podemos compartir ese Pan si no compartimos los sufrimientos de nuestros hermanos y hermanas necesitados”.
Esto recordó su vergonzosa homilía del Corpus Christi de junio de 2019, en la que afirmó que la Eucaristía es “Jesús que se hace pan”.
En la fe católica que fue transmitida por los apóstoles es al revés: el pan se convierte en el cuerpo de Cristo. porque la transubstanciación cambia la sustancia del pan en la sustancia del cuerpo de Cristo (Catecismo de la Iglesia Católica n.1376).
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