El cantante inglés Oli London, de 32 años, anunció en junio de 2021 que se identificaba como “transracial” y que quería parecerse a su ídolo, un cantante pop coreano llamado Park Jimin.
Se sometió a treinta grotescas cirugías plásticas y gastó más de 270.000 dólares para parecerse a él. A principios de este año, anunció que había completado su “transición racial”.
A los que se burlaron de él, les respondió: “Si se puede ser transexual, se puede ser TRANSRACIAL. ¿Por qué la gente tiene un doble rasero y es tan hipócrita cuando me critica por ser coreano?”.
Pero después de unos pocos meses, ya está “des-transicionando”. London dijo el 12 de noviembre en el sitio web FoxNews.com que se consideraba [de momento] “convertido al cristianismo”, que su identidad ficticia había sido un “gran error” y que sólo quería ser “un muchacho”.
La Biblia le ha ayudado a aceptarse tal y como Dios le creó, dijo en el sitio web CatholicNewsAgency.com.
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