Cardenal Gerhard Müller: “Algunos obispos ya no creen en Dios”
El programa de la Iglesia es salvar almas, “no apoyar el Gran Reinicio de los banqueros ateos-globalistas que ocultan su despiadado enriquecimiento personal detrás de la máscara de la filantropía”.
Müller duda de que el Sínodo sea cubierto por el secreto pontificio, porque “450 participantes no mantendrán las cosas en secreto”, sino que utilizarán a los activistas de los medios de comunicación en su propio beneficio. Müller llama a esto “la gran hora de la manipulación”, que "hará a la Iglesia más mal que bien”.
Nos recuerda que los falsos profetas, que se presentan como “progresistas”, quieren convertir a la Iglesia en una organización de ayuda para la Agenda 2030. “En su opinión, sólo cabe una Iglesia sin Cristo en un mundo sin Dios”.
Müller cree que incluso hay obispos que ya no creen en Dios como origen y fin del hombre y salvador del mundo. Consideran a la “Madre Tierra” como el principio de la existencia y la neutralidad climática como “la meta del planeta Tierra”.
Para Müller, bendecir el comportamiento inmoral de personas del mismo sexo o del sexo opuesto es “una contradicción directa de la palabra y voluntad de Dios, una blasfemia gravemente pecaminosa”.
Explica que un Papa no puede separarse de la Sagrada Escritura, de la Tradición Apostólica y del Magisterio que le precedió. “De lo contrario, así como Lutero malinterpretó el papado, se pondría a sí mismo en el lugar de Dios, que es el único autor de su verdad revelada”.
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