es.news
4670

Este bebé fue abandonado para que muriera: pero Dios tenía otros planes

El bebé Jacobo nació en julio del 2017 a las 23 semanas, cuatro meses antes de la fecha debida.

El padre de Jacobo es un católico tradicional, provida y amigo de Gloria.tv. la historia completa de Jacobo fue relatada en Gloria.tv en alemán, como muchas fotos.

Cuando Jacobo nació estaba como muerto y, como consecuencia de ello, tuvo que ser reanimado. Después de siete minutos los médicos se rindieron. Los pulmones de Jacobo no estaban desarrollados, sus niveles de sangre mostraban deterioro de células y órganos. Sin embargo, todavía respiraba por sí mismo, aunque jadeando.

Los médicos concluyeron en que Jacobo no tenía oportunidades para sobrevivir. Por eso el bebé fue puesto sobre el pecho de su madre para esperar que muriera. Su padre lo bautizó.

Cuando el cuerpito de Jacobo se puso más frío, su mano izquierda tomó un dedo de su padre. Los padres rezaron el Rosario. El pequeño Jacobo siguió respirando.

Dado que él mostraba una fuerte voluntad de vivir, su padre le pidió al médico, después de una hora larga, que reanudara el tratamiento, aun cuando esto pudiera significar que Jacobo sobreviviera con discapacidad. El padre dijo a los médicos que él iba a amar a Jacobo de todas maneras.

El niño fue examinado de nuevo. El médico encontró que contra todas las posibilidades Jacobo mostraba signos de progreso en el pecho de su madre. Ellos reanudaron el tratamiento y, para sorpresa de todos, no hubo más complicaciones serias.

El informe médico final destacó que los padres son “muy religiosos” y consideran esto “un resultado sorprendente” como respuesta a la oración. Los médicos comentan: “Pudimos confirmar que...”.

Actualmente, Jacobo es un niñito desarrollado normalmente. Según su padre, comparado con sus hijos cuando éstos tenían la misma edad, su nivel de lenguaje es el mismo, pero superior en su aspecto motriz.

#newsLuszdybomd

la verdad prevalece
Gloria a Dios. 👍
liz hurtado
👏 👏 👏
JOSÉ JAVIER TORRES PONCE
👍
José Luis (OFS)
Salvado por el sacramento del Bautismo y de la devoción al Santo Rosario, ¡Bendito sea Dios ahora y por todos los siglos de los siglos. Amén!