Sínodo concluido: No hay bendiciones para homosexuales ni mujeres diáconos
Las discusiones en el Sínodo sobre la homosexualidad practicada o la "bendición" de tales uniones NO están incluidas en el texto final.
Sobre “la identidad de género y la orientación sexual” afirma detalladamente: “Las categorías antropológicas que hemos desarrollado son a veces inadecuadas para captar la complejidad de los elementos que emergen de la experiencia o del conocimiento de las ciencias y requieren refinamiento y estudio adicional”.
Sobre los sacerdotes casados y las ordenaciones [inválidas] de mujeres el documento simplemente pospone las discusiones hasta el próximo Sínodo en octubre de 2024.
La palabrería: “Es necesario continuar la investigación teológica y pastoral sobre el acceso de las mujeres al diaconado, aprovechando los resultados de las comisiones específicamente creadas por el Santo Padre, así como los estudios teológicos, históricos y exegéticos ya realizados".
El celibato “no es una cuestión nueva” y debería estudiarse más a fondo.
Estos dos párrafos recibieron la mayor cantidad de votos negativos: Mujeres Diáconos (279-67) y Celibato (291-55).
Otros temas en el documento:
• Afirmar que un consenso de los fieles (consensus fidelium) es un criterio seguro para la forma en que se decide la doctrina de la iglesia.
• Llamado a utilizar un lenguaje ideológico de género en los textos litúrgicos.
• A los sacerdotes que han abandonado o traicionado el sacerdocio se les debería asignar una tarea pastoral caso por caso [truco].
Francisco no ofreció un discurso de clausura anticipado para el ex Sínodo, sino que simplemente agradeció al personal del Sínodo y les recordó que “ajustaran sus relojes porque esta noche ‘se atrasa’ la hora en Europa”.
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